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(s/f) snack favorito (puede ser bollería o lo que sea)
(p/f) película/saga favorita

[Editado 26/06/20]

Finalmente llegó el Viernes, y con él mis ganas de que acabaran las clases aumentaron más de lo normal. Tal era el cansancio de prestar atención durante las últimas clases que pasé la última hora hablando con Shindo por mensajes. Está bien, quizás la razón por la que no prestaba atención no era sólo debido a que la clase era aburrida, ya que no estaba relacionada con nada de héroes, sino porque era Shindo con quien hablaba, lo que hacía que me tuviera que aguantar alguna que otra risa. Pero pese a todo, se me hacía imposible contener mis sonrisas, lo cual hizo que Ectoplasm parase la clase para reñirme por usar mi teléfono durante la clase. Me disculpé algo avergonzada debido a todas las miradas puestas en mí y guardé mi móvil en la mochila hasta que la clase acabó. Hasta que finalmente todos fuimos liberados y nos dejaron irnos. Me sentía extremadamente feliz ya que justo este fin de semana nos habían dicho que podríamos pasarlos con nuestras familias, razón de más por la que tenía muchas ganas de que el día acabara.

 - Vaya ridículo has hecho cuando Ectoplasm te ha hechado la bronca -dijo Bakugo, quien ahora caminaba a mi lado -¿Qué hacías si quiera con el móvil? Si no tienes amigos con los que hablar.

Le saqué la lengua haciendo una cara extraña ligeramente molesta por su comentario aunque sabía que no lo decía con intención de herirme, sólo decía la verdad.

 - Bueno, quizás si mi mejor amigo no fuera tan tonto como para estar castigado por una estúpida pelea no tendría que encontrar nuevas personas con las que pasar el tiempo.

 - Oi, ¿estás intentando reemplazarme? -dijo con un tono de enfado aunque sabía que en realidad no lo estaba, sino que más bien estaba sorprendido.

 - Claro que no, no hay nadie que pueda ser más estúpido que tú, Katsuki -le dije pasando mi mano por su pelo como si fuera un perro, haciéndole gruñir lo que me hizo sonreír más.

Al poco tiempo acabamos llegando a una bifurcación y cada uno se fue por caminos distintos, aunque viviéramos bastante cerca el uno del otro. Era curioso de hecho porque nunca nos habíamos  conocido antes hasta que fuimos a la U.A y entonces nos dimos cuenta de que realmente vivíamos casi al lado del otro.


Al mismo instante en que abrí la puerta dos brazos me dieron la bienvenida en un dulce y estrecho abrazo.

 - ¡(T/n)! Ha pasado tanto tiempo -dijo mi padre exagerando tristeza.

 - Papá, no ha pasado si quiera un mes -dije sonriendo, devolviéndole el abrazo. Dejando que su calor me reconfortase. Incluso aunque le hubiera dicho eso yo también le había echado de menos.

 - Lo sé -dijo dejándome ir, dando palmaditas en mi cabeza sonriendo -pero no cambia el hecho de que haya echado de menos a mi niña.

 - Ya soy mayor, deja de llamarme así... -dije entrando en casa algo avergonzada, haciéndole reír.

 - No importa cuánto crezcas (T/n), siempre serás mi niñita -dejé ir un quejido como respuesta -He comprado (s/f) está mañana.

Mis ojos se abrieron llenos de felicidad ante la vista de (s/f). Después nos sentamos en la mesa a comer y hablamos un poco sobre lo que habíamos hecho durante la semana. Estaba escuchándole hablar sobre sus compañeros de trabajo mientras lo único que mi cabeza me repetía era que quería hablarle de Shindo. Era algo molesto porque cualquier cosa que mi padre dijera mi mente lo enlazaba con él de alguna manera, incluso si era algo estúpido mi boca sólo quería hablar de él y explicarle a mi padre que tenía un nuevo mejor amigo. Así que, después de intentar contenerme y no hablar de manera aleatoria sobre alguien que él no sabía ni quién era finalmente lo acabé soltando. Después de haber estado hablando del examen de licencia provisional finalmente le dije que había mantenido el contacto con un chico de otra escuela y después de eso la oleada de preguntas empezó.

 - Y este chico, Shindo, ¿a qué escuela va? -preguntó totalmente sereno.

 - Ketsubutsu -respondí -¿Sabías que hay una cosa llamada "La destrucción de la U.A" en el examen? Se ve que todas las escuelas se alían para ir en contra de la U.A y deshacerse de ella.

Mi padre negó con la cabeza, haciéndome saber que no tenía ni idea.

 - ¿Y qué pasó? ¿Cómo conseguisteis superarlo? -me preguntó, le sonreí dándome cuenta de que había echado de menos nuestras conversaciones más de lo que pensaba.

 - Yo ya me había separado del resto cuando pasó, pero se ve que como la U.A se estaba defendiendo bien como equipo, Shindo usó su habilidad y destruyó gran parte del terreno. Realmente fue una gran molestia porque reinó la confusión e hizo que todo el mundo se separase. Fue muy inteligente -mi padre me miró sonriendo -Uhm, en realidad papá, Shindo y yo queríamos jugar a unos videojuegos que tengo, y también quería que viéramos una de sus series favoritas. Así que , uhm, ¿vendrá mañana? -dije dudando ya que por alguna razón me sentía tímida al respecto. Él sólo sonrió más.

 - Ah, está bien. Después de oír tanto de él me ha despertado la curiosidad.

De la nada me sonrojé y desvié mi mirada sintiéndome extrañamente rara, pero después él cambió el tema y la conversación siguió. Teníamos tanto que contarnos que antes de que nos diéramos si quiera cuenta ya era la hora de cenar, así que pedimos unas pizzas y nos las comimos mientras veíamos (p/f) ambos quedándonos dormidos en el sofá. Sin embargo para cuando me desperté estaba arropada cuidadosamente en mi cama. Me removí contra las cálidas sábanas y dejé que mis ojos se ajustaran a la luz del día, y cuando ya estuve más consciente de mis alrededores cogí mi teléfono y miré los mensajes.

Shindo: Salgo ahora, estaré ahí en algo más de media hora.

La pequeña parte de mí que aún estaba dormida se despertó de repente. Miré la hora en la que había enviado el mensaje, hacía 15 minutos. Entonces miré la hora y me di cuenta de que me había dormido y que en poco más de 15 minutos estaría aquí. Salí corriendo de mi dormitorio al baño.

 - ¿(T/n)? ¿Ya estás despierta? -me preguntó mi padre desde la planta baja  pero no obtuvo ninguna respuesta ya que ya me estaba duchando a una velocidad que no debía ser ni humana. Volví a comprobar la hora una vez salí de la ducha y vi que aún tenía algo menos de 5 minutos. "Por favor no seas puntual..." recé en mi cabeza. Me acabé de arreglar un poco y finalmente me puse unos pantalones cortos decentes y mi camiseta favorita dos tallas más grande.

Bajé las escaleras hasta la cocina y engullí una tostada medio quemada esperando acabar el desayuno lo más rápido posible, haciendo que mi padre me mirase sin entender. 

 - Buenos días, por fin te levantas -me dijo, a lo que yo le contesté un "mhm" con mi boca llena -me han llamado hace media hora. Tengo que ir al trabajo, es una emergencia. Pero estaré aquí antes de la cena.

 - Ah no pasa nada, haré tu comida favorita.

Plantó un beso en la coronilla de mi cabeza saliendo de la cocina.

 - Puedo comprar algo de sushi también de camino aquí si quieres -dijo desde la entrada.

Dejé de comer mi tostada, pensando en el sushi notando mi boca salivar. Pero acabé negando con la cabeza.

 - No hace falta, no gastes dinero en eso. Ya haré la cena.

 - Okay, gracias. Adi- paró de repente en mitad de la palabra haciéndome pensar que a lo mejor le había pasado algo -(T/n), creo que Shindo ha llegado.


Yo Shindo x Reader [Español]Where stories live. Discover now