Mi mate es una guardiana ©

Parte 13

Llegamos a la casa y me baja de la misma manera, yo trato de poner resistencia, pero es inútil, estoy demasiado ebria para poder ponerme de pie, arrastra me lleva hasta mi habitación, abre la puerta de golpe me mete a la fuerza y cierra la puerta de golpe, me avienta en la cama, trato de pararme, pero no puedo todo meda vuelta.

Eduardo - así que no eres virgen, entonces no habrá problema que me acueste contigo

Ara - yo nunca me acostaría contigo prefiero acostarme con otro que contigo (tomo fuerzas y me siento)

Me levanto para poder salir de ahí, pero me fallo mi equilibrio tropiezo con Eduardo cayendo encima de él y me agarro de su hombro, él me toma de la cintura mirándonos a los ojos, su mirada baja a mis labios, de repente siento sus labios sobre los míos este era mi primer beso, el no hace ningún movimiento.

Trato de separar mis labios de los de él, pero no puedo él no me deja me tiene bien agarrada, no medí cuenta cuando puso su mano atrás de mi cabeza, con la otra mano me pega más a su cuerpo sintiendo todo su calor, su cuerpo duro y firme en eso abro un poco mi boca y el aprovecha para meter su lengua en mi boca y luego empezó a mover los labios, en eso lo empujo y el me suelta.

Ara - no me vuelvas a besar

Eduardo - no me importa lo que tú quieras, tú eres mía y lo vas hacer ahora, voy averiguar si no eres virgen

Se empieza a quitar el saco y luego la camisa yo retrocedo chocando con la cama y caigo sobre la cama Eduardo aprovecha para subirse sobre mí, me toma de las manos y las sube muy bruscamente haciendo que me queje de dolor por mi herida, a él no le importo me empieza a besar bruscamente por todo mi cuerpo, trato de zafarme, pero no puedo, con una mano me agarra y con la otra desabotona mi blusa, mira mi cuerpo sus ojos cambiaron de color ahora son negros.

Ara – suéltame, tú ganas, soy virgen

Eduardo - ya lo sé

Ahora me besa mi cuello y baja hasta mis pechos chupando y mordiendo mi cuerpo, hasta mi abdomen besa mis cicatrices hasta que se dé tiene se aleja un poco y baja su mirada hasta mi herida.

Eduardo - ¿qué te paso ahí?

Al ver que no le respondo me quita la gasa.

Eduardo - dime, es resiente

Se quita encima de mí.

Ara - haciendo mi trabajo

Eduardo - ¿cuándo?

Ara - ayer por eso Tadeo me trajo las rosas, los chocolates y el oso, no todos son como tú, así que salte me voy a bañar para quitarme la borrachera

Eduardo - te ayudo

Ara - ¡NO! (trato de ponerme de pie, pero es imposible) que mierda tenía esa botella

Eduardo - la botella que agarraste es para los lobos es mucho más fuerte que la que toman los humanos, mira no puedes ponerte de pie y como te vas a bañar

Sin más me toma de la mano me acerca a él me quita la ropa, me carga como princesa, me mete a la ducha me ayuda a bañarme para que se me baje lo borracha.

Ara - maldito esta fría el agua

Eduardo - quién te manda a tomar así que cállate y aguántate

Después del baño con el agua fría salgo del baño y me pongo la pijama, ya me siento mucho mejor.

Ara - gracias

Eduardo - niña tonta

Me acuesto en la cama hasta que me quedo dormida...