2.

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BENJAMIN ANDERSON WARNER

Como se atreve esa... niña a burlarse de mi nariz, mejor dicho, como me he atrevido yo a avergonzarme y enojarme tanto como para dejar a la vista mi enrojecimiento.

¿Quién es ella?, ¿es nueva o algo así?

Entro a la habitación y voy directamente al espejo que cuelga junto a mi cama. Ya no está roja.

Odio que eso me pase cuando me avergüenzo o siento muy enojado, regularmente con un simple enfado no me pasa, así que nadie a excepción de mi familia saben que me pongo como Rodolfo, pero a partir de este día todo aquel que paseaba por el comedor lo sabe, por culpa de esa niña y su risa estruendosa.

—¿Qué tienes?, ¿un moco?—pregunta la voz de mi mejor amigo. Volteo de inmediato hacia su cama donde está recostado mirando su celular.

—No te vi cuando entré.

—Venías tan enojado que no lo notaste, ya no tienes la nariz roja.

Mi familia y mi mejor amigo eran los únicos...

Camino hasta el largo sofá y me tumbo en él para luego suspirar largo y pesado.

—¿Qué te hizo enojar?

—Una chica.

—Wow, seguro no cayó en tus encantos—se burla.

—Pues no, me llamó estúpido y se rio frente a todos por mi nariz, ¿y sabes que es lo peor?

—Ilumíname.

—Me llamó Rodolfo, sin ninguna pena, sabes, creo debe ser una de esas tantas chicas nuevas que definitivamente no saben mi posición, mi popularidad, lo mucho que va a llegar a desear que las mire en el futuro, pero definitivamente esa ya no tendrá ese privilegio.

—Tranquilízate, suenas como si fuera la realeza, solo olvídalo.

—¿Cómo?, crees que olvidaré que todos me miraron cuando gritó que soy como Rodolfo.

—No te preocupes, nadie se atreverá a reírse o volver a mencionarlo.

—No es que me preocupe o enoje que las demás personas puedan reírse de eso, son inferiores a mí, meros insolentes. Lo que me enoja es que ella lo hiciera.

—Ni siquiera la conoces.

—Exacto, ella no me conoce y se burló de mí, pero ya sabrá, se arrepentirá.

Ya no me dice nada, lo cual es raro porque definitivamente ama el chisme. Volteo a verlo y me doy cuenta que está concentrado en su celular viendo sabe que cosa.

—¿Qué miras tanto?, dudo que sea el horario de clases.

—Veo un perfil de una chica...

—¿Primer año?

—Segundo.

—Docenas de chicas nuevas han llegado y te decides por una de segundo. Mal ahí Max.

—Para mi ella es nueva, nunca la había visto hasta el día de hoy.

—¿Y tanto te ha gustado como para parecer un pre adolescente de secundaria buscando su perfil?

—No me ha gustado, no en el sentido de enamorado, sino para un juego de un par de semanas.

—¿Fuiste a dar una vuelta por el edificio de las chicas sin mi?, eso no es de mejores amigos.

—Aun no llegabas, no llores. Además no creo que necesites esa vuelta, ya le pusiste el ojo a la chica que te dijo Rodolfo.

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⏰ Última actualización: 4 hours ago ⏰

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