¿AMOR?-CAP. XXII

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-Yo buscaré a la chica y vigilaré un rato- Hakuba salió del cuarto.

Akako se encontraba con el niño en su regazo. Los malos espíritus rodeaban la casa a montones y todos querían su alma, pero ella hizo una barrera fuerte para que no se acerquen.

Según Hakuba, a él le dió debilidad por su mala alimentación y en sí, era verdad. Pero la bruja vió también que su parte espiritual no estaba tan bien, era muy vulnerable a los espíritus. Hacer una maldición a alguien en su estado es más que efectivo. Por ello, tendría que estar con él hasta que despierte y hasta eso el detective de Londres se encargaría de buscar a Ran.

-Necesito a Kudo aquí, sino estás en tu verdadera forma podría salir mal esto- acarició un poco su cabello.

-Todo lo que hago por aquel ladrón es imperdonable para una bruja, pero...- susurró y puso su mano en la frente del niño.

-No importa...- susurró unas palabras intangibles y un círculo mágico apareció a su alrededor.

Lo bueno es que la magia también ayudaría con la parte de la ropa.

Cerró los ojos y empezó con una especie de canto en otro idioma. El color rojo adorno la habitación e hizo que el pequeño cuerpo levite.

-Todo esto tiene un precio, pero estoy segura de que lo podrán pagar. Me han enseñado que ser uno mismo es lo mejor que se puede hacer, además me están demostrando que el miedo es un obstáculo muy grande, que cualquiera debe y puede superarlo. Confío en su presente y futuro. Mi ayuda acaba aquí- suspiró un poco y al abrir sus ojos yacía en medio de la habitación el cuerpo de un joven.

Con cuidado de no despertarlo, puso su mano en su pecho y sacó una pequeña luz azul.

-Hasta luego, Kudo. Y suerte- la chica se hizo humo.

-Mmm- abrió los ojos de a poco y vió detenidamente a su alrededor. -Increíble, lo que me faltaba- con dificultad logró pararse y darse cuenta de su altura - ¡¿Pero qué rayos?!

-Al fin te encontré "rata"- la puerta se abrió de un patazo. -Haciéndote el gracioso escondiéndote en las habitaciones, descuida el juego acaba aquí- aquel hombre sacó su arma apuntando directamente a su cabeza.

Shinichi tragó fuerte, aún no sabía cómo fue que regreso a su cuerpo normal y ya le estaban apuntando. ¡¿Qué más podría pasar?!

Apretó sus puños y trató de tranquilizarse. Respiro profundo.

-¿Acaso no hablas?- carcajeó de manera estruendosa -¿Qué pasa? así no es divertido. Al menos súplica por tu vida quieres.

El silencio otra vez reinó.

"-No moriré, al menos no por tus manos-."

-No tiene caso- disparó sin dudas.

Shinichi con habilidad pudo esquivar la bala y de inmediato con una patada en el rostro hizo que el hombre cayera inconsciente.

-Gracias por el arma- tomó aquel objeto y comprobó que aún tenga balas. Viendo que sí, la guardo en su espalda.

Abrió la puerta lentamente viendo a los lados. Nadie.

Caminó por los pasillos y no vió nada extraño. Bajó e igual parecía todo vacío. Algo andaba muy mal. Aseguró que al menos habían dos guardias alrededor.

Silencio y más silencio.

Sintió algo en su hombro y de inmediato se dió la vuelta y sacó el arma.

-Tranquilo, Kudo- alzó las manos.

-¿Hakuba?

-Ya veo que lograste entrar. Pero aquí no encontrarás nada, sígueme- hizo ademán con su mano y el detective no hizo nada más que seguirle.

-¿Acaso es una clase de pasadizo secreto?

-Se podría decir que sí. He visto a algunos hombres subir y bajar de aquí. De seguro revisando el lugar - veían directamente a una parte del piso que se encontraba a una esquina de toda la planta.

-¿Cómo la abrimos?

-Mira.

Giro una de las lámparas de pared que estaban cerca y el piso se abrió dejando ver una escalera.

-Típico de este tipo de casas- señaló Kudo.

-Lo malo es que parece que vienen cada media hora. Nos quedan 15 minutos y 53 segundos- Revisó su reloj y miro directamente

-Vamos.

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Ai se encontraba dormida con su medio cuerpo en la cama del chico en coma y la otra en una silla cercana.

Una pequeña niña soñaba y un joven trataba de despertar sin éxito.

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—¿Si esto desaparece?— apretó con más fuerza la mano de la niña.

—Solo sucederá lo que tú quieras que pasé— la niña se detuvo frente a una habitación. —¿Recuerdas quién estaba aquí?

Kaito con cuidado se acercó y abrió la puerta. Los monstruos seguían devorando todo a su paso. Dirigió su mirada a una camilla. Se acercó y contempló el cuerpo dormido de Shinichi.

Era el único sin ser devorado aún.

—¿Él—

—No te acerques, un solo paso más y podría colapsar.

—Pero... Yo...

—No hay nada que puedas hacer, él sigue vivo en el mundo terrenal, no debes tener contacto con él.

—¿Sabes cuánto daño le hice?— agachó la cabeza —todo por el sentimiento egoísta de tenerlo a mi lado. Él merece seguir, así sea sin mí, mis temores hicieron que me vaya sin ni siquiera habernos reconciliado— algunas lágrimas salieron— Quería protegerlo, pero solo impuse mis miedos. Pensaba que solo con él todo estaría bien y podría seguir mi vida...

—Lamentable, el humano nace y muere solo, mírame — la niña se puso de puntillas y secó sus lágrimas — yo también soy parte de ti y comprendo porque buscaste ese tipo de apego por él. Aunque siempre muestras buena cara a todo, la muerte de tu padre aún tiene consecuencias en ti. Al perderlo de niño te causo gran vacío e inseguridades. Lloraba siempre que podías y al hacerte Kid lo tenías siempre en mente porque era tu motivación.

—¿Eso quiere decir, que solo busque a Kudo para sentirme seguro?

—¿Dependencia? Puede ser... Las relaciones así siempre están en peligro. Porque como viste, sus miedos son más grandes que el amor. Y lo más triste, es que amar a alguien no es estar siempre a su lado. Tan sólo es hacerlo feliz...

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N/A: Nuevo cap, no me maten ya preparo el otro ;v

Cualquier sugerencia, crítica constructiva o si algún punto de la historia aún no está muy claro. Me lo pueden dejar aquí ->

Es esencial que me respondan, ya mismo llega el final y no me gustaría dejar cabos sueltos xd

Ustedes mis queridos lectores ¿qué piensan que es el amor? 👀
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Y eso, tengan una hermosa mañana, tarde, noche o madrugada 💜

Amor a través del cielo- (Kaishin)Where stories live. Discover now