Capitulo único

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Agradecería que me indiquen cualquier error ortográfico <3 Espero que les guste.

...

Jeonghan inhaló y exhaló lentamente el aire, intentando calmarse. Escuchó algunos chillidos, los cuales le dieron escalofríos. Se pasó el dorso de la mano por la frente para quitar unas gotas de sudor frío que tenia, pero al ver su móvil, se llenó de determinación.

"¿Aun no has salido corriendo como un bebé miedoso?" Leyó. Respondió de inmediato al mensaje, con el ceño fruncido.

"Jamás, idiota. Estaba bromeando cuando dije eso, ¿Por qué aun no lo entiendes?" Envió con nervios. Había cometido el error de hacerle saber a su mejor amigo que le tenía terror al dentista, por lo que este no dejo de molestarlo día y noche al saber que estaba obligado a ir.

Ahora estaba en la sala de espera, con una sensación fría y desagradable en su cuerpo principalmente por como al llegar vio una niña abrazando con fuerza a su madre y el niño que le tocaba antes que, a él, de repente chillaba con terror.

¿Qué tipo de tortura le hacían al pobre?

En su caso le tenía odio al dentista porque cuando pequeño fue varias veces engañado por sus padres sobre que iban a comprar helado o irían al zoológico, pero la verdad es que acababa en ese horrible lugar blanco. Era un tipo de trauma de la niñez, pero nunca quiso enfrentarlo hasta ahora, en donde sus dientes dolían mucho y su madre le pidió que fuera para no preocuparla más a ella y su hermanita.

Solo porque se los prometió a dos de sus personitas más importantes, seguía en ese lugar. También, quería demostrarle al molesto de su mejor amigo, Cheol, que no tenía miedo al dentista.

Escucho la puerta del consultorio abrirse, asustándolo.

Puso una expresión muy confusa al ver al niño de antes que se moría de terror, salir con una tímida sonrisa y los ojitos brillando. ¿Qué rayos?

Pasaron unos minutos en donde no sabia que hacer, cuando la de recepción al fin hizo algo diferente de estar en su móvil.

- Paciente Yoon Jeonghan, es su turno – Murmuro sin ánimos.

El de cabello castaño se levantó y con duda se dirigió a la puerta entreabierta. Toco un par de veces.

- Entra y toma asiento ahí – El dentista tenía una voz muy gentil, pero estaba de espaldas viendo algo y con suerte vio su mano al este indicarle la silla reclinada del mal, rodeada de todas esas extrañas maquinas. Con timidez y pánico tomo asiento – Yoon Jeonghan, 23 años y hace tiempo no vienes al dentista... esperemos que no sea una muela del juicio – Era tan suave la voz que no podía asociarlo a ese lugar.

Estaba nervioso mirándose las manos y solo asintiendo a sus palabras. Escucho sus pasos acercarse y como acomodaba las cosas raras esas.

- Hey, levanta el mentón – Obedeció dudoso y cuando lo hizo, se quedó congelado. Se perdió en unos hermosos ojos grandes y oscuros, luciendo como si tuvieran delineador por la forma de las pestañas y que le daban una sensación tan cálida – Vamos, señor Yoon, sonríe para mí. No te hare daño, tan solo quiero ayudarte – A pesar de que llevaba un cubre bocas, podía saber que estaba sonriendo por la forma de sus ojos.

No podía reaccionar. Estaba simplemente cautivado por esos ojos. Quería ver más de cerca a Hong Jisoo, el dentista con el que su madre le había conseguido hora, por lo que se dejaba hacer. Obedecía de inmediato cuando este le pedía que mantuviera la boca abierta, sacara la lengua o se enjuagara la boca con agua, pues tenía el privilegio de perderse en cada detalle único de sus ojos.

Sonríe para mi (JIHAN) / OneshotWhere stories live. Discover now