The Great Soundtrack Hetalia

I Think I Love You (RomanoxReader)

POV/ Lovino

Usualmente no vengo a ver a mi hermano... es demasiada alegría para mí, así que para mi desgracia esta vez fue extremadamente necesario y ahora no hay algo de lo que no me arrepienta, Feliciano se encuentra demasiado enfermo... simplemente no puedo creerlo porque siempre pensé "ya iré a visitarlo" y ahora parece que esta es mi última visita.
Debo aprovechar el tiempo supongo... aunque desde que llegué he detestado cada maldito segundo.  Cuando me dijo que fuera a verlo pensé que lo encontraría gritando, cocinando pasta e insistiendo en bailar con su danza terrible, pero...las cosas han sido bastantes diferentes. 

Era una noche ... "normal" supongo, estaba yo sólo en mi cuarto (el cual insisto NO es un desastre, no volveré a invitar a Kiku...) En fin, yo estaba leyendo algo, si soy honesto ni siquiera recuerdo bien lo que estaba leyendo, estaba aburrido y no ponía atención a lo que estaba haciendo, posiblemente se debía a que... era las 10 de la noche y mi cerebro decía "duérmete idiota", pero simplemente no lograba entrar en sueño.  Me paré y fui a la cocina por un tomate, "qué más da, no tengo nada mejor que hacer" pensé y fui a la nevera...

-Estúpida nevera... ¿de qué sirves vacía?- renuncié enojado -ya sé que debía hacer compras hoy pero... ahg- cerré la nevera, tomé un vaso y lo llené de agua.  En eso escuché el teléfono... realmente no quería contestar... pero nunca obtengo lo que quiero así que lo tomé.

-Buenas noches, ¿es el señor Lovino Vargas?- dijo una voz femenina

-Sí... ¿usted es del banco?- No se me ocurría otra cosa, normalmente son los bancos quienes preguntan por mi nombre.

-No señor, mi nombre es (t/n) y he llamado a petición de su hermano-

-De acuerdo... ¿y qué es lo que quiere?-

-Una visita suya señor-

-De acuerdo... Eh... no lo sé, estoy algo ocupado últimamente...- "mentiroso estúpido, hace un segundo estabas aplastado en tu cuarto demasiado aburrido porque no tienes nada que hacer" pasó por mi "conciencia", si así le puedo llamar.

-Por favor señor... el señor Feliciano desea verlo con suma urgencia- había cierto timbre de preocupación y tristeza en su voz

-¿A qué se debe? ¿Por qué no llama él mismo si es tan urgente?- Vaya, no puedo creer haber sido tan egoísta en ése momento.

-El señor Feliciano se encuentra terriblemente enfermo me temo.  El doctor ha dicho que ha de dormir temprano aunque básicamente está en la cama todo el día, a veces debo darle algo para dormir y me temo que él ya no está despierto.  Yo soy su enfermera y en todo el día no ha dejado de hablar de usted... para ser sincera, esto es un acto que va de mi cuenta propia y creo que él desea verlo-

-¿E-enfermo? ¿De qué?-

-Influenza señor, está bastante grave.  De vez en cuando le da por caminar en la casa e incluso se esconde de mí para que no lo lleve a la cama, pero pasan pocos minutos para que le dé algún ataque de tos y termine pidiéndome ayuda.  Ha tenido bastante fiebre, a veces presenta nauseas y el virus ha afectado bastante su sistema respiratorio-

-Ya veo- quizás mi voz se apagó... creo que empalidecí un poco y tuve qué recargarme en la mesa... me sentía mal, la noticia era como un balde de agua helada en la espalda. Había una pregunta que ansiaba hacer, pero el miedo a la respuesta me venció.

-Y... ¿vendrá señor?- Me dijo con esperanza... y  volteé a ver una foto de ambos cuando éramos niños... tendríamos 12 años entonces... ha pasado 8 años ya.  Es raro y no suele pasarme a menudo, pero... de repente reflexioné acerca de nuestro pasado... aveces peleábamos, pero éramos buenos amigos a pesar de las injusticias... "idiota ¿por qué te enfermas?"... sí, pero ése idiota era mi hermano y me necesitaba.