S T R O N G

35.No por mucho.

La noche había llegado otra vez a Hawkins, el cielo de este era oscuro y para nada estrellado, vacío.

En la cabaña de el bosque perteneciente a los Losers, todos ellos estaban reunidos en la sala y comedor.

Jacob, desmayado, respiraba tranquilamente en uno de los muebles. Todavía sucio de las alcantarillas. Los demás se habían bañado, pero no estaban tranquilos. No estaban para nada tranquilos.

-¿Creen que esté bien? ¿Alguna rata la habrá seguido? ¿Y si la están atacando de nuevo? ¿¡Y si no sabe cómo volver a ser humana otra vez!?-gritó Richie con histeria.

-¡Richie!-reprendieron todos mirándolo con enojo.

-¿¡Acaso soy el único aquí que está preocupado por ella!?-grita molesto.

-¡No! Pero actuando como un loco no la vas a encontrar-bufa Ben rodando los ojos.

-Es cierto...-murmura asintiendo-. Iré a buscarla-se dirige hacia la puerta.

-¡Richie!-vuelven a gritar todos.

-¿¡Qué!?-volteó molesto.

-¡Esucha, entiendo que estés preocupado!-asiente Nancy mirándolo-. Pero no puedes salir allá, es de noche y el Mindflayer está suelto-dijo con obviedad.

-¡Por eso mismo tengo que ir a buscarla!-asintió el de lentes.

-Richie, Camila no es estúpida-niega Eleven alzando sus cejas, hablando con suavidad-Ella sabe lo que hace, quizás tal vez está paseando con sus dragones-dijo.

-Exacto, ella sabe cuidarse, y nos cuidó a nosotros-recuerda Stanley-. Camila está bien, Richie-promete.

-Pues que llegue pronto, por favor-murmura suplicante.

-Si-asiente Eddie preocupado.

-¿Qué onda qué cuentan?-dice Pennywise saliendo de la cocina con una soda en manos.

-¡AAAH!-gritaron todos sobresaltadamente.

-Uy ¿los asusté?-pregunta divertido.

-No-niega Nancy con una boba sonrisa. Jonathan se sujetó la nariz.

-¿¡Dónde. Mierda. Estabas, payaso inútil!?-grita Richie caminando hacia donde él, golpeando su pecho.

-Ey, cuidado-lo señala-Estaba con Camila-

-¡¡Me refiero a que dónde estabas cuando estaban matándola!!-gritó con bastante rabia.

-Me atacaron como mil desollados en el camino, idiota-escupe el payaso en forma de humano.

-¿¡Ah si, pues-...Espera ¿cómo que estabas con Camila?-frunce el ceño.

-Sep, y está a punto de tocar la puerta-dijo, y justo en ese momento el timbre de la casa se oyó por todas partes.

Richie afligió su garganta y al instante corre hacia la puerta abriendo esta con toda la velocidad posible.

Camila alzó su mirada tímidamente, toda ella, todo su cuerpo y cabello estaban llenos de sangre seca, en el blanco de su cabeza habían manchas rojas, y su desnudo y exhausto cuerpo estaba cubierto por una sucia y desgastada manta.

Pero, a Richie no le importó nada de esto, y al segundo de abrir la puerta se arrojó sobre ella, abrazándola fuertemente.

La peliblanca al instante corresponde su abrazo, curvando el ceño y cerrando sus ojos, pegándolo más a ella, soltando un pequeño sollozo.

-Estás bien-susurra él con la voz quebrada, sus ojos se habían cristalizado.

-Estoy...sucia-susurró abriendo los ojos. Richie rió, entre lágrimas, separándose para ver su mugrienta cara.