PARTE 5

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꧁❀ ꕥ » narra omnisciente « ꕥ ❀꧂

tu relación con el híbrido de pastor alemán progresó, era alguien bastante serio, pero a pesar de que no era muy comunicativo contigo al principio lo fue ya después, le ofreciste que viviera contigo luego de que la confianza apareció, cuidaba de ti, había conseguido un trabajo con ayuda de algunos contactos que tenias con algunas organizaciones que apoyaban a los híbridos como seguridad en una discoteca.

— Aarón, Me voy, llegaré a las once ¿esta bien ?— Estas en la puerta de la casa ya con tu uniforme y una cartera.

—Te buscare, no me gusta cuando sales tan tarde — Lo decía serio, no discutiste con él, ya te habías acostumbrado a que te fuera a buscar al trabajo.

—Esta bien, nos vemos~ —Cerraste la puerta detrás de ti y fuiste hacia el taxi que habías llamado anteriormente.

Aarón se recostó del sillón, ese día no tenia trabajo, tampoco le gustaba pasar todo el día lejos de ti, Aaron había desarrollado un fuerte lazo emocional contigo, uno de los pocos humanos que lo había tratado con respeto y la única que demostró tanta amabilidad como para darle un hogar y sanarlo tanto emocional como físicamente, no era tonto, podía saber que te

quería, y mucho, no le gustaba hacerse a la idea que alguien te pudiera hacer daño allá afuera, por ellos siempre procuraba acompañarte de ida y vuelta si era muy tarde, pedía que lo llamaras cuando salieras, pero también que le dijeras la hora a la que llegabas al hospital, Aaron pensaba constantemente en las personas que conoces, que tipo serán, conocía a unos pocos, los que lo habían ayudado a conseguir su trabajo, y conversando con ellos se dio cuenta que aquello que lo había ayudado a veces te era una gran desventaja, sabiendo que era mas hábil y fuerte que un humano promedio le pidieron que te cuidara, sabiendo también que te quería no tenia dudas de querer cuidar de ti, el mundo era un lugar cruel, un lugar en el que gente inocente sufría a diario, un mundo en el que él fue maltratado y casi asesinado solo por nacer hasta que tu lo recogiste, Aarón viendo que las horas se le harían bastante largas decidió hacer los quehaceres, limpiar toda la casa y cocinar antes de salir a buscarte, pero debía salir de compras también.

Las horas pasaron, ya había hecho la comida y se encontraba tapada, quería esperar a comer contigo, no importaba la hora, un mensaje entro a su teléfono, eras tu, avisando que estabas a punto de salir, se coloco su abrigo y salio cerrando con seguro detrás de él, llamo a un taxi y fue en dirección al hospital, un constante malestar recorría su cuerpo, lo mantenía alerta, miraba hacia todos lados, incluso cuando llego a la entrada y paso seguía sintiéndose así.

— ¡Aaron! — Fue lo primero que escucho cuando apenas llego a entrar por completo al recibidor, al girarse pudo notar aquel feo moretón en tu rostro, te escondiste detrás de su espalda, mas atrás corría un hombre y detrás de él un grupo de enfermeros que buscaban atraparlo, supo que iba hacia ti y apenas el hombre estuvo lo suficientemente cerca soltó un puñetazo, lo suficientemente fuerte como para tumbarlo al suelo, la seguridad pronto llegó, intentaron llevárselo a él también pero interviniste rápidamente para que no lo hicieran.

— Solo...Vamonos... — Apretabas su brazo con fuerza, por mas que quisiera preguntarte y reventarle la cabeza contra el suelo al tipo debía esperar a llegar a su casa, durante todo el camino de regreso seguías apretando su brazo, no quiso decir nada, apenas llegaron te derrumbaste en tu sillón y tapaste tu cara con uno de tus cojines.

— ¿Que fue lo que paso allá? — Su voz seria seguía siendo la misma, poco a poco quitas el cojín de tu rostro para verlo.

—Él... Él era un paciente, yo... Lo atendí hace varios meses, constantemente va a llevarme regalos, mas de una vez me invito a salir, pero le dije que no... Él no me gusta, siguió y ya era muy común que me

dejara cosas... De un tiempo para acá... Se volvió mas agresivo, me amenazo algunas veces... Y aquí esta el resultado... — Señalaste el morado que tenias en la mejilla — No pensé ...que llegaría a tanto ...— Te sentías algo avergonzada por el incidente y haberlo envuelto a él también en eso.

— Tienes suerte, no se ha vuelto a aparecer por aquí. — Le das una sonrisa a la recepcionista, ella era quien normalmente debía lidiar con aquel tipo, sus visitas eran muy constantes y era extraño que en dos semanas no se apareciera por ningún lado, no cuestionaste, de hecho, te sentías bastante bien ahora, mas que todo porque Aaron se mostraba mas protector contigo, sales del hospital y allí esta él, ambos toman un taxi y vuelven a casa, el sigue dentro, después de todo, debe irse a la discoteca a trabajar.

La Obsecion del HibridoWhere stories live. Discover now