Como Cualquier Día

943 23 5
                                    

Narra Mal

Ya había pasado cerca de un mes desde la coronación de Ben. Todo en Auradon había transcurrido con total serenidad, menos Audrey con sus celos hacia mí. Terminé de hacer mi examen de química y me reuní con Ben. Era jueves, por lo que teniamos nuestra "cita semanal."

-Hola Mal - me dijo mientras me hacía una reverencia -. ¿O debería decir Lady Mal?

-Jaja, hola su Majestad - le respondí también haciendo una reverencia.

-Ah, por cierto, toma. Te veré luego de que lo leas.

Me entregó una pequeña carta y se fue la más rápido que pudo. La carta estaba escrita en verso, y decía lo siguiente:

"Feliz Mesiversario"
Hace un mes ya
que te confesé mi amor,
y quiero que volvamos
a aquel lugar especial para los dos
Ben

PD: A las seis en punto

Me puse la mano en la cara de inmediato. ¿Cómo pude olvidar que hace un mes fue nuestra cita en el lago encantado?

Miré la hora: eran las cuatro. Supuse que Ben quería prepararme una sorpresa y también darme tiempo para arreglarme. Salí corriendo hacia mi dormitorio.

-¡EVIE! ¡MIRA!

Le mostre la carta y ella me respondió tras leerla.

-Déjame adivinar: lo olvidaste.

-Ey, sabes que no soy buena para las fechas importantes.

-Y déjame adivinar otra vez: necesitas que te ayude a arreglarte.

Asentí con la cabeza.

-Muy bien M; solo déjalo en mis manos.

Narra Ben

Todo estaba listo: el lugar, la decoración, y mi regalo.

Estaba bastante nervioso, pero si podía ser el líder de un reino, ¿por qué no podía organizar una simple sorpresa para mi novia?

-Solo debo esperar a que mi princesa morada por fin aparezca.
Eran las cinco y media.

Narra Mal

-¿Y bien?

-Guau, estás realmente linda - me dijo Evie.

-No exageres. Estoy igual que en la primera cita; hasta estoy usando el mismo vestido.

Miré la hora: ya eran casi la seis.

-Ya debo irme.

-Mal, ¿crees que le guste el regalo?

-Tranquila Ev, estoy segura - contesté guiñandole un ojo.

-Buena suerte.

Recité un hechizo que me llevó directo al puente que llevaba al lago encantado. Ahí Ben ya estaba esperandome.

-Llegas un minuto tarde - bromeó.

-Ja-Ja; no sabía que eras comediante.

-Soy muchas cosas que no sabes. Pero bueno; cambiando de tema, cierra los ojos.

-¿Esto no es te parece un déjà vu?

-Solo toma mi mano Igna.

-Lo que ordene, rey Florean.

Luego de una risa compartida, Ben me guió hacia el lago exactamente igual que en nuestra primera cita.

-Muy bien, abre los ojos.

Lo que ví me paró el corazón por un segundo: había una mesa con velas, las columnas del lago estaban llenas de guirnaldas moradas y azules con formas de corazones, y había una cajita sobre uno de los platos.

-Guau. - dije asombrada -. B-ben, ¿hiciste todo esto por mí?

-Bueno, tuve algo de ayuda de mi madre, pero el regalo es completamente mío. Ven, siéntate.

Me ofreció una silla para que me siente y él se sentó en la otra.

-¿Qué preparaste? - pregunté con intriga.

-Antes de comer deberías abrirlo.

Abrí la caja, encontrándome con un collar de corazón morado con una cadena de plata.

Estaba totalmente impactada.

-¿Y bien?

-N-no se que decir. Es hermoso.

Volví a la realidad tras los segundos de shock, y le entregué una caja azul.

-Tu turno. Es de última hora, así que no esperes un castillo.

-Tranquila, sé que me encantará.

Al abrirla, se pudo ver un pequeño anillo dorado, muy parecido al que Ben me había regalado el día de su coronación, solo que tenía mi cara impresa.

-¿Qué no espere un castillo? Esto es incluso mejor - me respondió mientras se lo ponía -. ¿Cuándo lo hiciste?

-Hace una hora - dije sacando mi libro de hechizos -. Te sorprenderías lo fácil que fue.

-Lo olvidaste, ¿cierto?

-Jeje, me atrapaste - respondí riendo-. ¿Me ayudas a ponérmelo?

Ben se paró y me colocó el collar. Tras abrir los regalos, comimos una gran cena.

-¿Cómo estuvo? - me dijo tomando mi mano cuando terminamos.

-Fantástico. Gracias.

-¿Ahora ya sabes lo que es el amor?

-Por supuesto - le respondí dándole un beso en los labios.

Cuando nos separamos, le hice una curiosa propuesta.

-Ey, he estado practicando en un nuevo hechizo, ¿quieres verlo?

-Claro, ¿por qué no?

Tomé mi tenedor y cuchillo y los coloqué en cada extremo de la mesa, recité el hechizo y ambos cambiaron de lugar en un instante.

-¿Cambio de lugar de objetos? Se ve interesante. ¿Lo has probado en personas?

-No he tenido tiempo, pero si quieres...

-No será peligroso, ¿verdad?

-Tranquilo, tengo todo bajo control.

Nos paramos de las sillas y comencé a recitar el hechizo, pero me resbalé con el piso mojado. Ben alcanzó a tomarme rápido, pero dos rayos salieron de mi mano en dirección a nosotros.

Y luego: oscuridad.

Cambio de Mundos | Descendientes [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora