El que se sonroja, pierde

De compras

Alya iba caminando por todas las tiendas de París con su celular en manos y algo enojada.

Alya: ¡¿Por qué rayos ponen sus WiFi con contraseña?! Éso debería ser ilegal, tengo que levantar una protesta.

Dio un suspiro con fastidio y vio como Nino salía de una librería con una sonrisa victoriosa.

Alya: Oye Nino ¿qué haces?

El chico se quedó estático en su lugar por ser visto y su novia se acercó a él.

Alya: ¿Qué llevas en ésa bolsa? ¿Pornografía?

Nino: ¡Claro que no! ¡Me tengo que ir, adiós!

Quiso huir pero la chica lo tomó de la mano.

"¡¿Por qué rayos tengo tanta mala suerte?!"

Alya: Ya dime que compraste.

Nino tragó duró mientras ella se paraba frente a él.

"Tengo que cambiar el tema de conversación rápido o podría descubrirme."

Nino: Tú ¿qué compras nena?

Alya: Un traje de baño ¿me ayudas a elegir uno?

El moreno la miró fijamente.

"¿En serio oí bien? ¡Ella quiere mi opinión con un tema tan importante y valioso!"

Alya: Te sangra la nariz.

Nino: ¡¿Qué?!

Llevó su mano a su nariz asustado y Alya se rió por que logró engañarlo.

Nino: Me tengo que ir, adiós.

La chica lo paró con su mano.

Alya: Hagamos un trató, si adivinó que libró compraste me ayudarás a elegir un bikini y si tú ganas te devuelvo tu gorra y tus películas de sailor moon.

Nino: ¡Trató hecho!

Se dieron la mano como señal de trató.

Nino sonrió victorioso mientras su novia pensaba.

"No hay manera de que adivine que libró compré, yo gané."

Alya: Un libro de la saga Crepúsculo.

El chico palidecio y sudo nervioso.

Alya al no recibir respuesta le sacó la bolsa y efectivamente en su interior estaba el mencionado libró.

Alya: ¡Victoria gloriosa! Ahora cumple con el trató.

Y lo arrastró con ella a una tienda para comprar un bikini.
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Nino estaba con sus mejillas rojas y algo sudado por las inquietantes prendas femeninas que habían a su alrededor.

Alya: Nino ¿qué opinas?

Volteó y se sonrojo aún más al ver las cortinas del probador abrirse para revelar a su novia con un bikini de dos piezas de color negro.

Nino: N-no está mal.

Alya: Entonces me probaré otro.

Nino: ¡¿Qué?!

La chica lo miró con una sonrisa mientras estiraba las cortinas.

Alya: Seguiré probandome hasta que me digas "que sexy estás, me enamoré más de ti nena."

Nino: ¡Jamás diré éso!

Alya: Entonces jamás nos iremos.

El chico rasco su cabeza desesperado.

"¿Cómo es que las chicas son tan crueles con los niños buenos como yo?"

Alya: ¿Nino?

La chica asomó su cabeza entre las cortinas.

Alya: Pasame ése bikini que esta a tu izquierda, el azul con el signo de wifi.

El chico enrojecio mucho más.

"¡¿No me digan que del otro lada Alya esta... indecente?!"

Agarró el bikini y se lo pasó pero antes de agarrarlo se le cayó.

Alya: Rayos.

Abrió las cortinas y Nino tapó sus ojos con sus manos aunque veía por en medio de sus dedos.

Nino: ¡¿Qué?!

Alya: Gracias.

Y se volvió a meter adentro mientras Nino caía de rodillas.

Nino: Si tenía la ropa puesta ¿por qué se cubría?

Se limpió un par de lágrimas que se le salieron y vio como Alix y Kim se acercaban.

Nino: Esto es malo, si me ven aquí seguro que me van a molestar por días.

Miró a todos lados nervioso y se ocultó.

Alya: Listo ¿qué tal me queda?

La chica salió y se encontró con Alix y un muy sorprendido Kim.

Alya se sonrojo y se tapó con la cortina.

Alya: ¿No vieron a Nino?

Alix: No, no lo vimos.

Le dio un pellizcon a Kim y éste miró a otro lado algo sonrojado.

Kim: Ya apurate Alix, esto es vergonzoso.

La chica lo agarró de la oreja y se lo llevo afuera.

Alix: Tú me das vergüenza, pervertido.

Alya miró a todos lados y escuchó como en el otro probador alguien soltaba un suspiro exagerado.

Alya: ¿Estás muy avergonzado?

Nino: Si.

Alya: ¿Lloraste?

Nino: Si.

Alya: ¿Quieres ir a nadar conmigo el próximo sábado?

Nino: Si...¡No espera!

Alya: El próximo sábado será, que no se te olvide. Ya te puedes ir yo me voy a cambiar.

Con éso dicho Alya estiró las cortinas para cambiarse y Nino salió del otro vestidor al borde del llanto.

Nino: Odio mis hormonas, odio ser tan débil y sobretodo odio que a Alya le encante molestarme.

Y así Nino pasó el día más incomodamnte de toda su vida... por ahora y Kim y Alix parece ser que se llevan mejor.