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—Señor abogado, necesito de verdad que pueda estar en Seúl para las 4. No se preocupe por los vuelos o trenes, desde aquí le hemos preparado un helicóptero.

—Deberá recargar un coste adicional por no pedir turno.

—Eso no me supone un problema. ¿Cuánto quiere?

—800.000₩

—Hecho. ¿Número de cuenta? Se los voy a transferir ahora mismo.

La llamada seguía escuchándose por aquellos grandes altavoces. Al escuchar "número de cuenta", el presidente sacó inmediatamente un post-it de su bolsillo y un bolígrafo.

—Eso es información que no nos debemos perder —aclaró el presidente.

—Sí, el número de cuenta es xxxx xxxx xxxx xxxx xxxx xxxx —prosiguió el abogado Im a través de la llamada.

—Muy bien, en 15 minutos le llegará el dinero a su cuenta. Dentro de 45 minutos, el helicóptero estará en el helipuerto de la torre que está a una calle de usted. ¿Correcto? 

—Sí, estaré allí. ¿Y la estancia?

—Le pagaré yo un hotel, sin problema alguno. 

—Bien, esperaré el helicóptero a la hora que usted me dijo. 

—Ok. Hasta luego. —Y la llamada fue colgada.

—¿Nada más? ¿¡NADA MÁS?! ¿No la habíamos rastreado a tiempo como para escuchar la explicación que le daba al abogado Im y así poder enterarnos de su versión del caso? —preguntó el presidente cabreado.

—Al parecer no, señor. Pero hay otras maneras de sab- —Se vio interrumpido por el presidente.

—¡NO! ¡¿QUÉ OTRAS MANERAS VA A HABER?! ¡NO ESTOY DISPUESTO A QUE ESA NIÑATA MALTRATADA ME GANE EN ESTA! 

—Señor, tranquilícese por fav-

—¡¡¡NO ES MOMENTO DE RELAJARSE!!! ¡¡¡HAY QUE ACTUAR CUANTO ANTES!!! ¡¡¡AHORA TODOS SEGURÉIS MIS ÓRDENES!!! VUESTROS JEFES NO PUEDEN DAROS NINGUNA ÓRDEN QUE NO HAYA DADO YO. ¿¡ENTENDIDO TODOS?!

—Sí, señor —respondieron todos al unísono, cual ejército militar.

—ME RETIRO. ESPERO QUE ACATÉIS MIS ÓRDENES. —Se fue, no sin antes dar un portazo en la puerta. No iba a seguir más en ese edificio lo que restaba de día, sino iba a ir a su casa. Necesitaba relajarse de alguna manera, ¿cómo? Ni él mismo lo sabía, solo lo intentaría.


Por el lado de Saeyoung...


—Una vez entras al agua completo, ya no está tan fría —afirmó Saeyoung tratando de convencer a Saeran para que entrara en la piscina—. Por el lado de la derecha no haces pie, pero por la izquierda sí.

—Bueno... Venga, voy a entrar. Es la primera vez que entro a voluntad propia. —Remarcó las dos palabras finales, haciendo referencia a cuando su hermano lo empujó. Lentamente, fue bajando por las escaleras de la piscina hasta acostumbrarse a la temperatura del agua.

—Suni, ¿por qué no entras también? —la invitó Saeyoung.

—Vale, ¡apartaos! —Suni corrió hacia la piscina y se tiró de bomba—. ¡AAAH! ¡Está fría! 

—Cuando te acostumbras no. Eso te pasa por bruta. 

—¡Yo no soy bruta! ¡Tú eres el bruto, Saeran! ¡Yo soy femenina y muy linda! —Suni apartó su pelo a un lado cual anuncio de Pantene—. ¡KIKI MAJENS TU MASELF! 

Nos Salvaste - Fanfic Mystic MessengerOnde histórias criam vida. Descubra agora