Sophie se encontraba lavando su rostro mientras que observaba que cada día su cuerpo iba muriendo más y más, mientras que su marido estaba feliz con quien sabe cuantas mujeres más, suspiro y comenzo a caminar a su habitación en busca del abrigo nuevo que le había traido Michael, dispuesta a salir, cuando de pronto tocaron a la puerta, ella suspiro amargamente mientras se dirigía a ver de quien se trataba, giro el pomo hacia Kingsbury y trato de crear una sonrisa forzada.
-Hola Justin, ¿Que te trae por aquí?
El chico rubio de sonrisa calida, miro a Sophie con preocupación.
-Ya que no vienes a verme, me toca venir personalmente a preguntarte ¿Has tomado una decisión sobre el tratamiento? Mientras más antes lo empecemos, mejor ...
Sophie no permitio que continuara, y con una respuesta cortante pero educada dijo.
-Gracias, pero dame un poco más de tiempo para considerarlo.
Esa respuesta decepcionó a Justin, pero el no era quien para presionarla, sin embargo, un sin sabor en la boca se le hacía cada vez que ella rechazaba aquel tratamiento, despues de luchar un poco más, decidio rendirse e irse, no sin antes advertirle que debe tomar una decisión lo más pronto posible.
Un momento más tarde, la chica decidio salir a un lugar que frecuento más de una vez con Howl en el pasado, la dueña era una antigua bruja del páramo, la amable ancianita saludo a Sophie con jubilo, mientras traía un desayuno completo para ella.
-¡Hace mucho tiempo que no te veo por estos lados! ¿Acaso estas más delgada? No deberías trabajar tanto.
Sophie ladeo una sonrisa.
-¡Me he vuelto una floja! Luego de mudarme, deje de caminar por estos lados.
La señora sonrio a Sophie mientras que iba a atender otra mesa, la chica miro su desayuno mientras que un recuerdo venia nuevamente a su mente.
Unos años antes se encontraba Sophie y Howl sentados en la misma mesa, y con desayuno completo, Sophie con entusiasmo hablo.
-¡Comamos!
Howl miro de lado ocultando su apetito, y con una mentira trato de engañar a Sophie.
-Come tu, yo no tengo hambre.
La chica hablo a la no tan anciana dueña del local, y pidio otro plato, sonrio y paso medio desayuno al otro plato, mientras que con una gran sonrisa, habló.
-Comamos juntos, no tendremos suficientes fuerzas para realizar conjuros y ganar dinero, si no comemos.
Howl bajo la mirada mientras lagrimas salian lentamente por aquellos hermosos ojos azules.
-Por el resto de mi vida...¡Definitivamente no te decepcionare Sophie!.
Una solitaria Sophie daba pequeños bocados a su comida, mientras pensaba mil cosas en su mente.
"Hay menos comida en el plato, es más pequeño... al igual que nuestro amor."
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¿Que nos paso?
Fanfiction-Puedo hacerte feliz en este mundo, pero tu ¿Que estas dispuesto a hacer? Si hasta ir a casa es un pesar para ti, realmente no se, si el proximo año, en la primera noche de invierno, ¿podre comer panceta con tocino contigo? ...
