al menos cenaron y no es como si fuera una quedada de amigos, aunque ambos eran algo estúpidos y obviamente no se daban cuenta de los sentimientos que tenían el uno por el otro.
pocas veces se quedaban mirando, porque cuando uno se daba cuenta que el otro le estaba mirando, el mismo que le miraba desviaba la mirada algo ruborizado por haber sido descubierto.
aunque habían ocasiones en las que se quedaban mirando embobados como si el otro fuera la obra de arte más valiosa que alguna vez han creado.
cuando terminaron de alimentarse y de beber mucha agua, porque hay que hidratarse chicos, no olvidéis beber agua, ambos volvieron al sofá para empezar a hablar de cosas triviales, entre ellas jeno se quedaría a dormir.
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cat's café. nomin.
Short Storycuando el mejor café para gatos abría sus puertas y todos se preparaban con esmero. sus sonrisas impecables, sus camisas bien acomodadas. y, sobretodo, los buenos sentimientos. ¡bienvenidos a leena's parade!