A de Aleteo

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Ella era como una mariposa, libre de volar hacia donde quisiese.

Giyuu no podía evitar verla (últimamente más) revolotear a su alrededor, tratando de hacerlo molestar o irritar, para variar.

Era como el aleteo constante de una mariposa persiguiendo esforzadamente la flor más bella que encuentre.

Con esos comentarios hirientes y luego con sus adorables risitas nerviosas (algo que no admitiría frente a ella, por supuesto) hacia sentir en su interior una sensación de calidez extrema.

Shinobu aleteaba a su alrededor cada vez que podía y aunque eso al principio le molestaba, se empezó a acostumbrar. 

O más bien, quiso sentirla cerca mucho más.

Tal vez se acostumbre tanto que luego no soporte tenerla lejos. Debía pensar en eso seriamente.

Bueno, lo pensaría luego del almuerzo que tendría con ella.


ABC de una parejaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora