KiriBaku Month

Boda

La cena había comenzado más temprano de lo normal, la familia consumía sus alimentos tranquilamente, platicaban amenamente y contaban su día.

— Papis — llamo la atención el pequeño Seiji de 4 años.

— ¿Qué sucede?, ¿No te gusto?, ¿Quieres algo más? — Eijirō preguntó preocupado.

— No es eso papá, es sólo que... — el pequeño guardo silencio no muy convencido de preguntar lo que quería.

— Amor puedes decirme lo que quieras — Eiji sonrió.

— ¿No se van a enojar? — bajo su cabeza.

— Habla mocoso — ordeno Katsuki tratando de conservar la paciencia.

— ¿Cómo se conocieron? — pregunto tímido.

— En la escuela — contesto el rubio.

Eiji soltó una risita al escuchar la respuesta de su esposo, sabía a que se refería su hijo.

— ¿De qué te ríes? — pregunto molesto.

— De nada — sonrió — fue el primer día de clases — dijo recordando.

— Todos se conocen en el primer día de clases — Katsuki dijo.

— Pero tu no me agradaste — confesó.

— ¿No te agradaba papi? — pregunto curioso.

— No, nada, nadita — dijo — por eso lo ignore por 2 años — sonrió.

— Eijirō, yo fui quien te ignoro, tu eras como un chicle en el zapato — lo miro molesto.

— No es cierto — se defendió.

— Creo que tanto producto para tu cabello de mierda te afecto — dijo enojado.

— Eso... — recordó que estaba su hijo y guardo silencio, cruzo sus brazos e hizo un puchero.

Katsuki lo ignore y su hijo lo vio confundido.

— Papi si se llevaban mal, ¿Cómo terminaron casados? — para tan corta edad hacía preguntas de grandes.

— Eso es algo que ni yo se — dijo el rubio sincero.

— ¿Papá? — miro al pelirrojo.

— Bueno... fue por una apuesta — dijo recordando — Mina nos apostó que no lo hacíamos y nos casamos, el castigo era mantenerla por 5 años juntos a su esposo y no quisimos eso, la boda fue rara por así decirlo, pero no me quejo con el tiempo y la convivencia me enamore de tu papi y naciste tú — acaricio los negros cabellos de su hijo.

El pequeño se quedo pensando en lo que dijo su padre Eiji, terminaron de cenar y el pequeño fue a dormir.

— No debiste decir eso — dijo Katsuki preocupado.

— Es la verdad — Eiji se encogió de hombros.

— Pero aun así... — guardo silencio al ver la mirada de Eijirō.

— Mira lo que le dije a Seiji es verdad, bien lo sabes, para que mentir — se metió a la cama.

— ¿En verdad te enamoraste de mi? — quiso quitarse esa duda.

Suspiro y desvío la vista.

— No del todo, mira no quiero darte falsas iluciones pero bien sabes porque motivo estamos juntos, sólo por Seiji, si él no estuviera yo no estaría aquí contigo — dijo sincero.

Katsuki se guardo su comentario eso le había dolido, aunque aparentara ser fuerte él también era humano.

Se mordió el labio para no soltar nada, salió de la habitación con la escusa de ir por agua, pero en verdad él fue a la sala a llorar unos minutos.

Sintió unos bracitos tratando de abarcarlo en un abrazo, al darse cuenta correspondió.

— Ve a dormir — dijo Katsuki.

— Escuche lo que dijo papá — eso sorprendio al rubio.

— Él estaba jugando — trato de sonreír.

— Si fuera así tu no llorarías — seco las lágrimas con sus dedos — quiero que seas feliz — el pequeño lo abrazo.

Se quedaron así hasta que el niño se durmió.

Se levantó con él en brazos y lo llevo a su habitación para que descansara más cómodamente.

La boda o mejor dicho el matrimonio entre estos dos jóvenes no fue de la mejor manera.

Pero tal vez Eijirō se de cuenta que en verdad ama a su pareja y a su hijo, aunque lo aprenderá de la peor manera posible.

Continuara

Soy impredecible muajajaja

Se aceptan sugerencias...

El siguiente es el último capítulo de esta serie de

30 días KiriBaku/BakuShima