El salón estaba en completo silencio.
Lo único que se escuchaba era una molesta mosca, que volaba entre los alumnos de la clase 2-B.
Stuart Pot mantenía su cerebro ocupado en otra cosa, mordiendo su lápiz en tono soñador, no podía apartar la mirada del profesor.
Un hombre mucho más bajo que él, de tez verdosa, que escribía sin parar en el pizarrón, dándole la espalda a sus alumnos.
- Muy bien. - Cerró el libro que tenía en su mano libre de forma ruidosa, dejó la tiza a un lado y se sentó en su escritorio. - Terminen eso y retirense, me aburrí de ustedes.
Los alumnos no discutieron, salir una hora antes les favorecía mucho a ellos.
La única que resopló molesta fue Noodle, la amiga íntima de Stuart, ella no estaba a favor de la manera en que el profesor Niccals daba su clase.
Por su parte, a Stuart le daba igual.
No importaba si se esforzaba o no en la clase, si entendía algo de lo dictado o no, después de todo, con el profesor Niccals, siempre llevaba buenas calificaciones.
El profesor sacó un cigarrillo y lo prendió, sin importarle que en el reglamento de la escuela decía estaba prohibido fumar, mientras que apoyaba sus botas negras en el escritorio y reclinaba levemente su asiento.
Los estudiantes comenzaron a salir uno a uno, a medida que iban terminando la labor, Noodle miró a Stuart quién seguía ensimismado en sus pensamientos y luego observó al profesor, quién sonreía de manera divertida, sin apartar la mirada del peliazul.
- Te veo más tarde, Stu. - Murmuró la nipona casi en un susurro, mientras que juntaba sus cosas.
- Eh... - Le tomó un segundo a Stuart darse cuenta de donde estaba. - Ah sí, claro.
Ahora el salón estaba completamente vacío, Noodle había dado un portazo que llevó a Stuart a la realidad.
Estaba a solas con el profesor Niccals.
Se sintió levemente nervioso, por lo que apartó la mirada y junto sus piernas.
El profesor Niccals apagó lo poco que le quedaba de su cigarrillo, frotándolo con fuerza por debajo de la mesa de su escritorio y se levantó del mismo para dirigirse a su estudiante.
- Stuart Pot... - Dijo mientras apartaba el cuaderno del nombrado y se sentaba en la mesa de su pupitre. - Ah... - Suspiró con decepción. - Debo avisarte que... tus calificaciones han bajado.
Stuart levantó la mirada sorprendido, el nerviosismo que sentía se intensificó.
- Pero hice todo lo que--
No pudo terminar con su excusa, Murdoc ya lo había tomado por el cuello de su uniforme y había introducido su lengua de forma frenética.
Stuart no se resistió y le siguió el beso con frenesí, su nerviosismo se había disipado, pero ahora una nueva sensación lo había reemplazado, su cuerpo temblaba y su cerebro estaba en blanco, pero su boca se movió instintivamente.
Murdoc lo apartó de un empujón, Stuart termino de vuelta en su asiento, atolondrado por los movimientos repentinos del profesor Niccals.
Murdoc se levantó y se desabrochó el pantalón, mientras que se sentaba en la mesa de otro pupitre que se encontraba al lado de Stuart.
- Date prisa, en una hora tengo otra clase. - Sonrió.
Stuart igualmente sonrió, mientras que se acercaba al miembro descubierto de Murdoc.
