𝘒𝘪𝘴𝘴𝘦𝘴 𝘰𝘧 𝘤𝘩𝘰𝘤𝘰𝘭𝘢𝘵𝘦 (YoonKook)

Capítulo Único

¿Alguna vez has observado con suma atención los ojos de un niño?

¿No?

Bueno pues si lo haces con mucha atención; En su mirada refleja mucha confianza, curiosidad infinita y felicidad por doquier. Una franqueza, pureza y frescura son solo una mínima parte de lo que representan los ojos de un niño.

Los niños conservan una particular manera de mirar la vida y el mundo que los rodea. Dueños de un mirada sencilla, alegre, crédula e imaginativa ante toda situación cotidiana.

— Mami, quiero tener un hijo — la mamá se congeló en su lugar al escuchar a su pequeño.

Ellos ven el mundo lleno de colores, ellos nos alegran sin dudar nuestro día, de formas tan simples e inocentes.

— ¿De qué hablas amor? — preguntó la mamá acariciando el rostro del pequeño Jung Kook.

— Es que...Yo quiero tener un bebé, así de chiquito — junto sus manitas, abultado sus mejillas — Quiero cuidarlo como tú me cuidas a mí, Mami — la señora Jeon no dudo en reírse.

Su pequeño niño no tenía idea de la responsabilidad que era tener un hijo, a su edad de seis años era tan inocente que cualquier cosa a su alrededor le llamaba su atención, haciendo miles y miles de preguntas hasta llegar a saciar su curiosidad.

— Cachorro, estás muy chiquito para tener un hijo, espera a estar más grande como papá — él niño hizo un pequeño puchero.

Jung Kook no quería esperar a ser un adulto. ¡Él ya quería a su bebé!

— Mamá, ¿cómo nacen los bebés? — y aquí venía la pregunta que nunca haría falta.

Pero... ¿Cómo explicárselo a un niño?
Ella simplemente no le diría un invento como el de la cigüeña, siempre le hablaría con la verdad a su pequeño hijo.

Tomó asiento enfrente del pequeño y con amor le revolvió sus cabellos, lo tomó en sus brazos para sentarlo en su regazo y darle un besito en la frente.

— Los niños nacen con amor, mamá y papá se dan muchos besitos, pero no son los mismos besitos que te damos nosotros a ti — acarició su rostro con ternura — Son besitos diferentes, y eso es sólo cuándo ya estés lo suficientemente grande.

Bueno, no siempre le diría la verdad a veces cambiaría la situación a su favor, como cualquier persona.

— Mami, ¿sólo se puede ser niña con niño? — la mamá sabía que su KooKie le atraían los de su mismo sexo.

Lo intuía porque Jung Kook era tan transparente que podía leer o ver todo con claridad, su hijo era gay y él pequeño lo sabía.

— Claro que no bebé, el amor puede estar en todo lugar, sea hombre o mujer — Jung Kook le sonrió a su madre.