43

7K 154 16
                                    

Personaje: Peter Parker
Título: Un borracho nunca miente
Advertencia: -
Nota: -
_____________________________

-¡Adios mamá, pásala bien en Toronto con los abuelos!

Mi madre me regaló una dulce sonrisa y estiró su mano por la ventanilla para despedirse, a los segundos arrancó el auto alejándose de nuestra casa. Cuando mis ojos ya no podían ver el auto por su lejanía decidí entrar otra vez. Caminé hasta el sofá para desplomarme en él, una sonrisa inundó mi rostro.

-Por fin casa sola.

11:00pm

-¿Me estás diciendo que quieres hacer una fiesta en tu casa? ¿Acaso estás loca? ¿Sabes lo destruída que quedará después?

Giré mis ojos al escuchar la aguafiestas de mi amiga mientras revoleaba zapatos por todos los lados de mi habitación, ¿Cómo es que no tengo nada para ponerme?

-No seas así, Oli. Será divertido y con el desastre me encargaré.

-Eso no es verdad, te conozco y sé que no moverás un dedo por limpiar-se cruzó de brazos-Me gustan los tacones rojos.

Levanté todos los zapatos para terminar de quedarme con los rojos.

-Bueno, te prometo que esta vez si limpiaré. Ahora arréglate que la fiesta es en una hora.

Mi amiga me miró indecisa teniendo una gran duda sobre que hacer.

-Bien, me voy a bañar.

-¡Si!-Canté victoria.

-Pero si rompen alguna de las tazas que tu mamá colecciona yo no me haré responsable-Acusó con su dedo.

-Trato Hecho.

12:30pm

Música a todo volumen.
Alcohol.
Risas.
Gente besuqueándose y bailando por doquier.

Si, definitivamente esto es lo que tenía en mente.

Mis manos pasaban por mi cuerpo al ritmo de la música, mis ojos cerrados y relajados me hacían disfrutar aun más el momento mientras una sonrisa se posaba en mis labios. Había tomado unas copas demás pero eso no me prohibía nada, menos si se trataba de bailar.
Abro un poco los ojos divisando una melena castaña entrando por la puerta.
Y ahí es cuando pare.
Como si el alcohol se hubiera salido de mi cuerpo y mi cabeza volviera a funcionar por un instante dejé de moverme siguiendo aquella cabellera que tanto conocía. Comencé a correr a la gente que se interponía en mi camino tratando de llegar lo antes posible.

-¡Hey, Parker!

Y ahí estaba él, tan lindo como siempre.
Con su suéter celeste y sus sucias zapatillas, esa sonrisa tímida y esas mejillas rosadas.
Tan perfecto.

-Hola ____...-Sonrió.

-Viniste a mi fiesta-Dije con mucha emoción.

-Si, bueno...era mejor que quedarme en casa sin hacer nada.

Una larga y torpe carcajada salió de mis labios logrando confusión en su rostro.

-¿Acaso estás borracha?

-¿Qué? Claro que no...no no no-Negué torpemente.

-Si...claro-respondió incrédulo.

-Como sea, vamos a tomar algo.

One Shots | Tom Holland Where stories live. Discover now