Capítulo 5

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Francia

Luego de terminar la ficha de la última niña que había ingresado al orfanato, me estire en la silla, tome mi teléfono recién eran las once de la mañana. Tenía algo de tiempo libre antes de comenzar con las visitas de las parejas que quisieran adoptar. Dudosa escribí el número de Maura en mi celular ¿la pequeña habrá vuelto a la escuela? Marque sin más esperando una respuesta.

- ¿Francia? -la voz amable de Maura sonó al otro lado

-Hola señora Horan-dije nerviosa, no podía creer que esa familia había vuelto a mi vida, todavía no podía asumirlo

-Fran sabes que puedes decirme Maura-dijo amable- ¿Cómo estás cariño?

-Mejor, ya de vuelta al trabajo-sonreí- ¿Como están por allá? ¿Cómo está Ayleen?

-Pues sigue durmiendo en nuestro cuarto...aún tiene pesadillas...ahora está jugando en el patio-hice una mueca- Pero con Bob estamos conteniéndola no es fácil perder a su madre...

- ¿Y Niall?

-Fran...Niall está en Los Ángeles tenía conciertos que dar...él no se podía quedar mucho tiempo

¿Cómo era posible que no pensara en su hija y el trabajo fuera más importante? Estaba bien que fuera responsable pero la pequeña niña lo necesitaba era su padre, ella como yo habíamos escuchado como la mataron, no era algo fácil de procesar ni siquiera para mí. El realmente ya no era ni la sombra de lo que yo alguna vez había conocido.

-Se que no te agrado escuchar eso Francia, pero mi hijo está muy cambiado-su voz se quebró- yo...no sé qué le paso ¿Sabes? extraño lo cariñoso que era, lo bueno que era con toda la gente, el cambio con algo de dinero se nublo y no sé qué más hacer...tampoco me gusta que no esté con Ayleen-un sollozo se escuchó-pero es mi nieta y no la dejare a la deriva

-Eres asombrosa Maura-hablé al fin- tú puedes contar conmigo...si la peque quiere hablar conmigo solamente que me llame, tú tienes mi número-luego de una pausa hable otra vez- ¿Podría ir a verla hoy?

-Claro mi niña, te esperamos en cena ¿Te parece?

- ¿Crees que pueda ir con alguien?

- Tú sabes que es como tu casa...claro que puedes

-Nos vemos entonces

-Adiós Fran

Deje mi teléfono encima, para luego colocar mis manos en la cara, mis emociones no podían más por el resto de año que quedaba, un vago recuerdo de mi amistad con Niall llegó a mí al pensar en cómo estaba cambiado este bello chico.

Golpeteaba una vez más mi rostro en el fastidioso cuaderno de matemáticas, escuchaba como Horan no dejaba de reírse por mi frustrado intento de aprender conjuntos. ¿Por qué nos hacían aprender estas cosas del demonio? ¿Acaso que cuando fuera a comprar pan pediría el conjunto de panes sin sal? ¡No Dios!

-Fran no es tan difícil ¿Sabes? -mi amigo despego mi cara del cuaderno

-Horan tú no te aprendiste los años de la guerra mundial que es mucho más fácil que esto no jodas-le respondí

- ¿Por qué hay que vivir en el pasado?

- ¿Y piensas siempre en el futuro?

-Me gusta soñar ¿Sabes? - dejamos nuestros cuadernos lejos y nos sentamos más cerca el uno del otro

- ¿A sí? -alce una ceja

-Pues mi mayor sueño es ya sabes, poder vivir de la música, poder compartir mi arte-sonrió- A veces pienso en tener familia, pero no lo sé-lo mire- solo sé que realmente en algún punto de mi vida quiero ser padre ¿Te imaginas lo genial que sería tener un hijo?

-Me encantan los niños...también me gustaría ser madre...pero bueno-baje mi mirada

-Fran sabes que igual puedes adoptar ser estéril...no te hace menos-me apego a él y me escondí en su pecho- ¿Te imaginas tú y yo fuéramos padres?

-Sería extraño sin duda

-No confiaría en nadie más que tu como la madre de mis hijos

Volví a la realidad al ver como entraba la señora Lois con una pareja de rasgos asiáticos tomados de las manos. Era el momento de preocuparme del presente y dejar ir al Niall del pasado, si no cada día estaría más decepcionada.  

Idiota «Niall Horan»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora