Perfectly out of key

Capítulo 1: Skin

"Everything I've held has hit the wall What used to be yours isn't yours at all"

Alexz Johnson

Un año después

Había pasado una semana desde que Guille y Eva la habían llamado para confirmarle que, finalmente, regresaría a Los Ángeles después de haber pasado un año completo recluida, alejada de su familia, amigos, sus cosas, su vida. Y, aunque la noticia le había parecido maravillosa en ese primer momento, con el tiempo, no estuvo tans segura de que estuviera lista para regresar. Ya llevaba muchos meses sobria, eso era cierto. Y no sentía la necesidad de beber o consumir nada. Sin embargo, esa tranquilidad la sentía sólo en Canada, en la soledad de su habitación, contenida por un equipo de psicólogos, coaches y compañeros atravesando las mismas dificultades. Volver a LA implicaba enfrentarse nuevamente a la vorágine incontenible que era su vida: excesos, exposición, una carrera en detrimento, la ausencia de sus padres, la presión ejercida por su hermana, la fama y sus responsabilidades como artista. Cada minuto que pasaba en el avión, su ansiedad crecía. Le habían enseñado muchas técnicas para mantener su mente serena, para poder lidiar con situaciones de estrés, a poder sobrellevarlas de manera completamente diferente a como lo había hecho en el pasado. Pero no estaba segura de que tan efectivo sería al ponerlo en práctica en la vida real. Desafortunadamente, todas sus pesadillas cobraron vida en el segundo en que puso un pie fuera de la puerta de arribos en LAX. Miles de flashes la invadieron, encerrándola en un círculo repleto de periodistas intentando fotografiarla para obtener, en exclusiva, las primeras imágenes del regreso de la gran Valentina Carvajal. Cientos de voces repetían como un insoportable eco las mismas preguntas una y otra vez. Las manos le sudaban, su cabeza daba vueltas en un espiral interminable y el aire comenzaba a escasear, hasta que de la nada, unas manos la jalaron hacia adelante llevándola a través de la marea de paparazzi hasta salir del aeropuerto. Sin llegar a comprender lo que estaba sucediendo, la empujaron suavemente dentro de un auto, donde unos brazos la estrecharon fuertemente, con necesidad y vehemencia.

"Vale, por Dios, lo siento tanto. No creí que sería tan terrible" Aún en estado de shock, pudo reconocer la voz. Guille. Durante todo un año su único contacto había sido, precisamente, a través de llamadas telefónicas, así que tenía muy vívida la voz de su hermano mayor en su cabeza. Valentina se abrazó con más fuerza a él, dejando que lentamente su cuerpo se relajara y su mente pudiera finalmente descansar, disfrutando del reencuentro que tanto había anhelado. Sin quererlo, algunas lágrimas comenzaron a escaparse de sus ojos, inundada por la emoción que sentía. Largos minutos pasaron hasta que se separaron, ambos todavía llorando, observándose con tímidas sonrisas.

"Te extrañé muchísimo" Dijo Valentina con absoluta sinceridad, ya un poco más recompuesta. Guille siempre había sido su mejor amigo, su confidente, la única persona que conocía todos sus secretos y quien realmente se preocupaba en entenderla y acompañarla. De todo lo que había echado de menos, no había dudas de que él ocupaba el primer lugar en la lista. Bueno, su hermano y la música, obviamente.

"También te extrañé, Vale. No tienes idea de cuánto" Respondió Guille con dulzura. "Aunque, siendo honesto, me hubiera gustado que pudieras quedarte unos meses más. Creo que hubiera sido bueno para ti. Eva y yo... Bueno, no creo que podamos darte la contención que necesitas, y eso me preocupa" Valentina lo observó preocupada. Sabía que había dejado a sus hermanos atrás con muchas cosas con las que lidiar, pero no era consciente de que tanto había sucedido en su ausencia. "Pero, en fin, estás aquí y estoy feliz de tener a mi hermanita de vuelta. Estoy seguro de que tu regreso será un cambio positivo. Lo necesitamos" La castaña tragó en seco ante esas últimas palabras. Moría por preguntarle qué tan crítica era la situación de la disquera, pero a la vez, temía escuchar la respuesta.