Madrugadas largas (Hay despedidas que nunca se acaban)

No sé qué te hace creer que a estas horas te pienso menos son las 3 de la madrugada, la casa esta callada como si nadie en ella habitara y la soledad se niega a darme la cara. Es incomprensible porque no asimilo las cosas cuando no tuve la culpa, uno pensaría que sería más fácil, que no cargarías con la culpa solo estoy esperando que Vargas en la cara me escupa y tratando de inventar excusas en mi mente para no decir que eres una...

-¿Porque habría de guardarte algún respeto?

-¿Qué clase de respeto muestra alguien que finge que te quiere, solo para no perder tu amistad?

-¿Qué clase de mierda de persona eres?

Ni siquiera sé cuál es la fórmula para pasar de amor a odio, para querer clavarte flechas de rencor y decirte que por más que me pidas disculpas eso no hará que me sienta mejor.

-¿Sabes que me haría sentir mejor?

Que siguieras tomando hasta ahogarte en tus propias mentiras, hasta que yo olvidara que te conocí alguna vez en mi vida, me hiciste creer que todo era tan real estoy tan jodido que parece normal.

Siempre te disfrazaste de víctima de tu pasado, ahora quisiera escuchar la otra versión, en la que no fuiste una santa y en la que te ganaste el karma que te tocaba.

Nena te ganaste cada miseria y cada lagrima que has derramado te la merecías, como pretendes que te vaya bien si tratas a la gente como basura, por eso te va como te va no eres una víctima, es causa y efecto.

Lo más jodido es que no consigo sacarte de mi cabeza desde hace un par de meses, es impresionante como te paseas por mi subconsciente a veces, porque en los juegos de perdonar tu eres siempre la que pierde.

No tienes ni puta idea de todo lo que hubiera hecho por ti, de todo lo que llegue a sentir y las ganas de querer gritar en el bar cuando tuve que leer tu mensaje de que te marchabas ya y la luna de esa noche, fue tan blanca como tus faldas, como tus vestidos, como todo lo que estaríamos haciendo sino te hubieras ido, sé que no soy un buen partido, pero te consta que estuve ahí siempre que habías caído.

Te vi tirada y te levante, cuando lo mejor hubiera sido que te comieran los gusanos, que pasearan por tus entrañas, sería una mamada si ahora dijeras que me extrañas, mis mañanas quería que fueran nuestras mañanas pero la cagas...

Con que ganas me dejas de intentarlo con alguien más, si cuando salgo con ella me imagino que eres tú la que ahí está, los suspiros se me van eres el aire que me falta.

-¿Amor que futuro te dé para?

Si el solo es una máscara de tus inseguridades, de que espero que veas esto en tu time line, abras el link y te des cuenta de todo lo que has hecho mal, eso no lo compensara dudo mucho que quieras regresar después de todo, luego eres un espejo de lo solo que me siento.

Quisiera que el tiempo avance para que me dejes de doler y después buscarte como si nada hubiera pasado y ahora que lo pienso:

-¿Qué tan jodido tengo que estar para seguir esperándote dentro de unos años?

Sería un desperdicio seguir siendo el mismo, lo más seguro es que finja no haberte tenido a mi lado ni que nada de esto hubiera pasado.

Me da nostalgia cada sábado pues fue sábado 7 el ultimo día que estuviste conmigo, soy un gato que quiere pasar sus próximas 6 vidas contigo, que quiere retroceder al tiempo para llegar a ese día en el cumpleaños de Many y tomar tanto, pasarnos la tarde charlando para llegar solo a dormir sin que habláramos tal vez así seguirías aquí, me visualizaba tanto viéndonos a los dos juntos, que me enferma verte con el ahora como si nada hubiera pasado, amor te estas cagando en lo que nos prometimos, dame más razones para escribirte con un blues de Gary B. B. Coleman, dame más dolor del que necesito para que sepa que sigo vivo, para servirme otro trago no de alcohol sino de rencor diluido.