Aunque no parezca, si uno mira la Luna, ojalá en periodo de Luna Llena, idealmente un día viernes o sábado en la noche. Va a poder ver que hay un par de conejos que están trabajando afanosamente haciendo un cosa esponjosa y pegajosa que se llama Mochi, se hace con una masa a la que le dan de martillazos uno tras otro, uno tras otro y uno tras otro. Esto es un hecho de lo más conocido así que no debería sorprender a nadie. Si se sorprende con esto, es que Usted tiene un problema, debería hacerse ver.
Si aún no me cree, estos dos individuos se pueden ver mejor mientras uno vea lo más mal posible y tenga la cabeza nublada de pensamientos tan esponjosos como dicho mochi.
Insisto mucho en la importancia de lo esponjoso, no porque tenga relevancia alguna en esta historia sino por lo rico que se siente imaginar cosas esponjosas. Vale la pena dedicarle un momento a la experiencia. Mmm...
Bueno, en esta historia aparece un tercer personaje, que es un Gato, bien cuidado y hermoso por fuera pero bien malo y podrido por dentro. Con aliento a mentas si, por favor no piensen que tenía mal aliento, figúrenselo bien fragante. Gato malo pero fragante.
La cosa es que este gato estaba en el baño leyendo el diario y vio un reportaje sobre el par de orejones y pensó en una buena idea según él: robar toda esa masa de mochi que tan trabajosamente fabricaban los conejos, luego venderla y ganarse un montón de plata.
El gato éste, sea dicho de paso y para contextualizar, trabajaba todo el día moviendo el brazo, supuestamente para traerle dinero a la tienda que le daba empleo y ya estaba aburrido. En realidad la plata que llegaba a la tienda era poca y la recompensa y las felicitaciones brillaban por su ausencia. Ni hablar de regalías. Con suerte tenía derecho a usar el baño... en el cual leía el diario.
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Un día el gato se decidió y les mandó un email a los conejos. Uno podría pensar que estos conejos esponjosos, por estar hace tanto tiempo metidos en la Luna, no deberían tener medios tecnológicos para recibir emails o por otro lado podrían pensar que: ¿cómo en esta época tan moderna, nuestros amigos conejos no van a tener un medio más choriflai, como por ejemplo instagram o esas cosas? Bueno, pues para que nadie pelee o bien dicho todos peleen, mejor digamos que tenían email.
El email contenía saludos y palabras bonitas y de vuelta volvieron palabras amistosas y así como jugando ping-pong como los maestros de oriente, se mandaron un montón de correos, al final de los cuales los conejos decidieron cambiar un tiempo de lugar con el gato, para tomar vacaciones. Conejos para la Tierra y Gato para la Luna.
La idea del gato, no lo olvidemos, era robarse todo el mochi de los conejos para ser súper millonario.
El plan tenía debilidades obvias.
Sin embargo y pese a todo lo anterior, la gran embarrada que quedó fue que los conejos eran tan grandes, tan famosos y tan esponjosos que toda la gente los quería abrazar y fotografiar con los celulares. Eso puso muy tensos a los conejos, que no eran muy dados a los abrazos y sin otra cosa que saber hacer, agarraron sus martillos con los que hacían la masa del mochi y empezaron a perseguir a todo el mundo hasta que quedó todo desecho.
Imagínese el mundo entero hecho mochi pero en vez de esponjoso y delicioso, quedó duro y cementoso (el mundo tiene mucho cemento así que que elsabor era de esperarse). No había diente ni panza capaz de comer nada del mundo-hecho-mochi así que a todos les dio un montón de hambre.
Por su parte el gato, no sabía lo que pasaba en la Tierra, pero se dio cuenta que no tenía como llevarse el botín de vuelta. Enojado, y viendo a la distancia a los conejos,empezó a arrojarles la masa de pura rabia. Recuerde Usted que el gato trabajaba todo el bendito dia moviendo el brazo, así que bajo la piel peluda se escondía un sendo brazo hercúleo, de fuerza inimaginable. Con dicha fuerza sobrenatural el gato lanzó por los aires cuanto encontró en la Luna, por lo que para felicidad de la gente hubo comida en abundancia para todos y la crisis fue superada. Todo esto obviamente fue fotografiado y comentado por toda la gente, como si sirviera de algo.
Por su parte, los conejos se volvieron a la Luna más estresados que nunca.
Para su sorpresa el gato, que estaba antes bien podrido por dentro, fue recibido como un héroe y recibió mucho cariño, todo el que los conejos no quisieron recibir, así que ahora fue un gato lindo y hercúleo por fuera y bueno y esponjoso también por dentro. Con muchos likes.
