《 I Hate Here 》 | Im Jaebum ✔️

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Esa fue la única palabra que pude decir, para que así JaeBum me arrancara, rápidamente la blusa, al igual que mi falda, para así dejarme en ropa interior.

Sus ojos estaban encendidos y yo más lo disfruté. Mis manos fueron hasta su pantalón y a movimientos torpes intenté deshacerme de el. JaeBum me sonrió y él mismo se alejó, para que pueda quitarse aquel pantalón.
Quedó semidesnudo y entonces sentí cómo el calor se juntaba en mis mejillas.

Llevó sus manos al broche de mi sostén, para quitármelo. Arquee mi espalda un poco y logró hacerlo.
Luego bajó sus manos a mis bragas y lo detuve.

Él me miró, me regaló una sonrisa y me dejó un beso en la frente, para que me diera tranquilidad.
Respiré hondo y dejé que siguiera con lo suyo.

Cuando logró hacerlo, se alejó unos centímetros de mí y me observó lentamente. Sonrió y apoyó ambas manos a mis costados, acercándose un poco.

— Eres preciosa. — murmuró cerca a mis labios, y dejó un casto beso en ellas.

Siguió con su cadena de besos, hasta que se quitó su ropa interior, desvié la mirada e impulsivamente cerré los ojos. Y sentí cómo se acomodaba entre mis piernas e inmediatamente las cerré. No iba hacerlo así.

— ¿N-No te pondrás...

Logré mirarlo a los ojos y él sostenía su sonrisa.
Buscó sus pantalones y una vez encontrados, rebuscó en ellas. En unos segundo sostenía en sus manos un preservativo.
Me sorprendí ante aquello.

— ¿C-Cómo? — cuestioné.

No me respondió y siguió con lo suyo nuevamente. Rompió aquella bolsita para así sacar el condón. Yo nuevamente cerré los ojos y escuché perfectamente como jadeó y supe entonces de que se había colocado el condón.
Sentí como se acomodó encima mío nuevamente y me separó las piernas.

— Me los trajo los chicos. — dijo y sentí como estaba por entrar. — ¿Lista? — sin abrir los ojos, asentí.

Se adentró de a poco, mientras dejaba escapar uno que otro jadeo.

Dolió sí, no lo negaré, pero JaeBum era cuidadoso.

— Estás apretadísima. — gruñó por lo bajo, mientras ponía sus mano en mi cintura y apretarme más a él. — Mírame. — pidió y yo lo hice. Su mirada reflejaba aquel deseo que se tenía guardado.

Aún no se movía, tal vez tenía miedo de lastimarme, pero yo le hice entender que quería más, así que enredé mis piernas en su cintura y lo abracé, pasando mis brazos a su espalda.
Él inmediatamente empezó a dar estocadas lentas. Los movimientos que hacia eran exquisitos y yo lo disfrutaba.

Sin medir el tiempo, aquellas estocadas lentas, fueron cambiadas por embestidas rápidas, empezó a hacer aquel "mete-saca" de manera rápida, robándome gemidos y suspiros, que cada vez eran más altos.

— Oh... JaeBum. — elevé mis caderas para hundirme más en él.

Él duplicó los movimientos, mientras dejaba besos en mi cuello y clavícula.

No quería que esto acabara... Pero siempre algo bueno dura poco.

El sonido de la puerta hizo que abriera los ojos, JaeBum detuvo los movimientos.