El mito de mi amor por ti

¿Algo tonto no?

—Dios mío... Dios mío, pero quien es esa niña – se escuchó a lo lejos

Yo al igual que mis compañeros, volteamos a ver de dónde provenía esa voz, Al voltear vimos que la voz provenía de la ventana de mi pieza.

Y pues yo ya sabía de quien se trataba, era el... era Canem Bi Hanabil

¾¡Baja!¾grité.

¾¡Silencio, escoria! ¿¡Quién leñes te crees, que eres!? ¡Para poder dirigirme la palabra!

Yo con una expresión asesina respondí- ¿Quién me creo que soy? ¡¿Quién me creo?! ¡DIOS MÍO YO LLEVO MUCHO MÁS TIEMPO AQUÍ QUE TÚ! ¡ASI QUE DEBERÍAS APRENDER A RESPETARME O VERÁS....!

— ¡¿Respetar a la escoria?!-¡Jamás! ¡Jamás! ¡JAMÁS! (reprochó)

— Tristítia al escuchar eso no aguantó eso y dijo- Oye... No hables así...

Al ver esto me decidí, entré a la casa y traer a Canem donde estábamos todos y darle una putiza a Canem, Lo deje inconsciente...

Ella al ver lo que hice dijo:

— ¿Qué has hecho? ¡¿Eres tonto?! Lo has... ¡Lo has matado! esta todo herido.... ¡Dios mío! ¡Dios Mío!....

Una de las profesoras al ver mi acto fue enojada, hacia donde yo estaba

— ¿Sabes, lo que hiciste, mocoso? [Me reprochó]

Luego de reprocharme, se acercó a donde estaba Canem

—Cera et invocare spiritus vita et morte sanandum est iste puer (dijo)

Lo repitió tres veces, antes de que saliera un círculo mágico.

Quedé impresionado al ver magia por primera vez en mi vida bueno no solo yo, todos mis compañeros quedaron impresionados a excepción de los maestros y las mujeres.

Vi como el cuerpo maltrecho de Canem recuperaba su color blanquecino

Después de un tiempo el círculo desapareció, pero yo no podía moverme me había quedado inmóvil pero por mi mala suerte.

En ese mismo instanteCanem despertó, y... se abalanzó sobre mí.