19:La leyenda

1.3K 109 25
                                    


Mis pulmones arden por el esfuerzo. No sé cuanto tiempo llevo corriendo pero no me importa. Solo quiero desaparecer. Me siento frágil, insegura, triste y ,sobre todo, culpable. Me llevo las manos a mis mejillas y seco las lágrimas sin dejar de correr. Tropiezo y caigo. Mi rodilla empieza a picar y mi codo izquierdo empieza a sangrar. Me quedo sentada, no tengo fuerzas para seguir corriendo.

-Joder-maldigo mientras miro mis heridas-¿por qué ahora?

Las lágrimas siguen cayendo. Un chico se acerca a mi estira la mano.

-¿Estás bien?-levanto la cabeza-Parece que te has hecho mucho daño.

Sin su ayuda me levanto del suelo. Debo de dar toda la pena. Sacudo el uniforme.

-Si-le miro-no es nada.

-Te vi corriendo y la verdad es que me sorprendió que fueras tan rápida-dice con lo ojos brillando-pero luego te caíste. Aún que fue alucinante de todas formas.

Mis mejillas se empiezan a calentar. Me ha visto caerme. 

-Yo....-que vergüenza-no sabía que alguien me vería.

-Ya, es un sitio bastante tranquilo-dice mirando a su al rededor-no suelo haber nadie, por eso vengo.

Asiento.

Espera.

-¿Dónde estoy?-mi pregunta parece pillarle por sorpresa.

-La verdad es que este sitio no tiene un nombre-responde al fin-Es un sitio mágico.

-¿Mágico?-pegunto levantando una ceja.

-Si,-aclara-mágico. Existe una leyenda que dice que la gente que necesita pensar o aclararse termina siempre aquí de forma casual. Se dice que es la isla la que te trae a este lugar, para que así puedas aclararte.-se toca el pelo-Bueno, algo así. Sé que suena a tontería pero es una leyenda bonita así que...

-Ya veo-miro el sitio-parece que la leyenda es verdad, porque yo estoy más perdida que nunca y he terminado aquí de forma casual-sonrío.

-Parece que si-coge aire-No quiero ser muy entrometido pero...¿por qué estás perdida....

-Parker-termino por el-mi nombre es Parker.

-Oh, yo soy  Héctor-se presenta-Entonces cuál es la razón de que esta isla te trajera a este lugar.

-Hice algo malo-respondo-algo malo que puede que perjudique a mis amigos, y la verdad es que no sé si ellos podrán perdonarme algún día.

El suspira.

-Supongo que eso que le has hecho ha sido horrible-ha dado en el clavo-pero no importa-le miro sorprendida-los amigos están para perdonarse y apoyarse. Seguro que tenías tus razones para hacerlo así que si se las explicas ellos tendrán que perdonarte. Porque son tus amigos.

-¿Y si no me perdonan?-pregunto asustada-¿Y si ya no me quieren ver más?

-Entonces no son tus amigos de verdad-responde seguro.

La verdad es que no tengo ni la más mínima idea de si la leyenda es cierta o solo una pequeñas excusa para hablar conmigo, pero Héctor ha conseguido tranquilizarme un poco.

-Gracias-susurro.

-No hay de que-responde-Ahora, déjame llevarte al médico para que te curen eso.

Asiento.


El médico solo desinfectó la herida y puso unas tiritas grandes encima. Héctor se había ido cuando salí del hospital así que decidí ir a dar una vuelta para despejarme.

Una estrella más (Inazuma Eleven)Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang