Amor de mi vida - Brian May

Capítulo 16: "La salida más incómoda del mundo"

-¿A Laura?- Preguntó John confundido

-Si, ¿Puedo?- Brian sonreía feliz

-Bueno, nos vemos en el cine a las 6...-

-Genial.- Brian cerró la puerta de golpe y John y yo nos miramos desconcertados.

-Bueno, rizitos ya está invitado, nos vemos a las seis en el cine. ¿Ok?-

Solo asentí y camine hasta mi habitación con mil preguntas.

Hasta que se me ocurrió una respuesta.

Tomé mi teléfono fijo y llamé al chico indicado...

-¿Hola?-

-Scott, soy Lillieth.-

-¡Lillie!, ¡Qué sorpresa!, ¿Qué pasa bombón?- Me sonrojé un poco por el apodo de "bombón".

-Seré directa. Saldré con unos amigos al cine, ¿Te apuntas?-

-Claro, ¿Quieres que pase por ti?-

-Si, gracias. A las seis Patt.-

-Vaya, tiempo que no me decías Patt, bueno pasó por ti a las seis.-

-Bueno, adiós.-

-Adiós Sulli.-

Cuando me llamo Sulli, me hizo pensar en Brian. Pero el tendría a Laura y yo a Scott, Jessie a John y Roger a ...

Mierda, Roger.

Lo olvidé por Scott, soy lo peor.

Eran las 6 de la tarde, ya estaba lista. Algo simple rímel, labial rejo mate, pantalones negros acampanados y una camisa blanca, cabello suelto y algo rizado.

Cuand llegue hasta el auto de Scott, note que estaba ligeramente sorprendido.

-Hola, ¿Qué sucede?- Dije con una sonrisa.

-Eh... Te vez preciosas, eso es todo.- Solté una carcajada inevitable y Scott arrancó el auto.

Cuando llegamos al cine todos estaban allí, Fui abracé a John, Jessie, Roger y luego tuve que ir a saludar a la parejita.

-Vaya, te vez genial Sulli.- Brian me miraba con una sonrisa hasta que Scott se acercó a nosotros y se le borró rápidamente.

-Y hola..., ¿Qué tal rulos?, Laura un gusto verte.- Scott le besó la mejilla a Laura y le extendió su mano a Brian.

Brian solo me miró molesto a mi pero le cedió su mano a Scott.

Sonreí sarcásticamente y todos entramos.

-No puedo creer que me cambiarás por Scott, Lill.-Me dijo Roger que se hacía el ofendido.

-Lo siento rubia, te debo una. ¿Te parece?-

-No.-

-Genial.-

Solo ignoraría a Roger, ya se le pasaría. Cuando ya estabamos el la sala me senté juntó a Scott, pero a mi derecha se sentó el ruloso.

-Oye, Bri, ven a sentarte aquí.- Laura lo miraba algo confundida por su desición de sentarse conmigo.

-Estoy bien aquí.- Brian se volteó y me miro nuevamente a mi. -Faltan 10 minutos para que empiece la película quiero hablar contigo afuera.-

-¿Para que Brian?.-

-Solo ven.- Me levanté de mi asiento y salí de la sala junto a mi mejor amigo.

-Bien, ¿Qué te sucede?.- Me crucé de brazos y lo mire fijamente.

-¿Porque has invitado a Scott?.- Rode los ojos fastidiada, ¡Era increíble que se haya enojado por eso!

-Era una salida de amigos, Tú invitaste a tu novia y yo invité al mío.- Brian abrió los ojos sorprendido, y hasta yo me asombré de lo que dije. Por que aquello no era cierto.

-¿Tú y Scott están juntos?.- Entré en pánico y tuve que continuar con la mentira.

-Pues... iva a decirtelo pero se me pasó.-

-¿Te olvidaste de decirme algo tan importante como esto?.-

-Brian, no es para tanto.- El ruloso suspiró y se cruzó de brazos también.

-Pues, si no me lo dijiste es porque ya no confías tanto es mi ¿Cierto?.-

-¿¡Qué!?, ¡Brian eso no tiene nada que ver!, ¡Eres mi mejor amigo confío en ti más que en nadie!.-

-Pues parece que ya no tanto...-

-Eres un idiota, ¿Cómo puedes pensar en eso?.-

-No lo sé, no me dijiste de tú nueva relación y tampoco que invitarías a Scott, ¡Esas cosas son fundamentales en una amistad!- Brian estaba bastante enojado y empezó a gritar también

-¿Sabes que?, Vete al diablo, no puedo creer que te enojes por eso.-

-Para ti son cosas insignificantes, pero si tuvieras más sentimientos y comprendieras la situación lo entenderías, ¿Porqué crees que recién tienes tú primer novio?, eres increíblemente ciega y no te has dado cuenta de que Scott no es el único chico enamorado de ti.- Las ganas de llorar me invadían pero no lloraría frente a él.

-¡A quién le interesa saber si le gusto a alguien o no!, ¿¡Acaso por que le gusto a Scott lo odias tanto!?.-

-En realidad si.-

-Bien, jódete, porque si quiero casarme con él es mi decisión no tuya.- Brian me miró desconcertado.

-¿¡Y quieres saber por que odio que te le gustes!?-

-¡No lo sé y no me importa!- Salí de allí como pude, no me importaba nada ni nadie