Insoportable (¡EUN!#3)

Epílogo

Dos meses después.

POV Stassie

Terminé de ver Diario de una pasión mientras una lágrima corría por mi mejilla.

Cada vez que la veo termino llorando, es mi película favorita en todo el mundo. Y sin importar cuántas veces la vea termino llorando.

Siempre he soñado con encontrar al amor de mi vida y tener una relación como la de Ally y Noah. Un amor genuino y perfecto como el de ellos.

Pero hasta ahora no lo he conseguido.

Pensé que Max Jones sería el indicado.

Desde el primer momento en que hablé con él nos llevábamos tan bien que creí que podría llegar a ser mi Noah.

Claramente me equivoqué... de nuevo.

Solíamos salir, pasarla bien y divertirnos mucho... hasta que bueno...

Mi prima Sophie llegó.

Y no la culpo, Max es un chico estupendo y al igual que yo ella se fijó en él.

Al principio no me sentí celosa ni amenazada por ella ya que se supone que ambos no se soportaban... Max solía llamarla "insoportable".

Pero de un momento a otro él se comenzó a alejar de mí y se comenzó a acercar a ella, haciéndome sentir muy mal.

Traté de recuperarlo pero era obvio que él ya no se sentía tan cómodo conmigo, y la razón era obvia.

Mi corazón se rompió en mil pedazos cuando Sophie me confesó que eran novios.

Aunque era algo que ya veía venir aún así me dolió mucho.

—¿Quieres más palomitas?— Liam habló, sacándome de mis pensamientos. Negué con la cabeza y me acomodé en el sofá. Él hizo una mueca— ¿Hasta cuando vas a seguir así?

—No lo sé, Liam.— me encogí de hombros.

—Sophie intentó hablar contigo y no le respondiste...  me lo contó.

—¿Y por qué habría de responderle después de lo que hizo?

Los dos están locos si creen que voy a responderle las llamadas.

Él soltó un suspiro— Ninguna de las dos se han llevado bien nunca... ¿por qué esperabas que ella te fuera leal si nunca ninguna lo ha sido con la otra?

Sé que tiene razón...

—Ya sé que siempre nos hemos llevado mal, y no esperaba lealtad de ella. Ni siquiera estoy molesta con ella por estar con Max... sólo es que de verdad él me gustaba mucho y no puedes pedirme que no esté triste.

—No te pido que no estés triste, yo te entiendo... pero sólo quiero que ambas intenten arreglar las cosas.

Negué con la cabeza— Créeme que no hay nada que arreglar.

Mi relación con las gemelas siempre ha sido algo difícil de explicar... ni siquiera nosotras mismas sabemos por qué nos llevamos mal, pero así es y supongo que siempre lo será.