CAPÍTULO 1

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Los rayos del sol se filtraron a través de los enormes ventanales de la mansión Agreste.
Nathalie se removió entre las sábanas blancas cuando empezó a despertar.
Se giró hacia su izquierda dejando escapar una sonrisa somnolienta cuando a su lado notó el cuerpo de Gabriel.
Abrió los ojos lentamente viendo a su recién prometido dormir plácidamente a su lado.
Se quedó pensando en todo lo sucedido en el último año: la revelación de sus identidades, descubrir que habían estado luchando contra Adrien tanto tiempo y sobre todo darse cuenta de lo que sentían el uno por el otro.
No había sido un proceso fácil. El joven Agreste al principio sentía reticencias a la hora de tratar con ellos pero poco a poco la situación en el hogar se había calmado y ya todo volvía a ser normal... O por lo menos dentro de lo que cabe cuando se vive en una casa llena de magia.
Ladybug, osea Marinette había accedido a perdonarles con la condición de que se convirtiesen en héroes junto a los demás.
Había sido un "castigo" suave comparado con todo lo que podría haberles hecho pasar.

Se levantó de la cama, dejando a Gabriel dormir un poco más. Miró todavía el anillo en el dedo de su prometido, aquel que le unía a Emilie...

Envolvió su cuerpo con la túnica morada que Gabriel le había diseñado y abandonó la habitación. Caminó por el pasillo. Hacía frío en aquella mañana de invierno.
Llegó hasta la habitación que era suya antes de que ella y el platinado iniciasen su relación.
Cerró la puerta tras de ella y se dirigió al vestidor. Estaba vacío excepto aquel cajón con doble fondo donde sabía que nadie iba a mirar.
Lo abrió cogiendo del interior el otro anillo a juego con el que lucía Gabriel en su dedo todavía.
Le dio vueltas y vueltas en sus dedos. Le había costado horrores hacerse con él. En un principio la idea era que "Félix" le quitase ambos a Gabriel pero lo que ella no contaba era que su prometido iba a guardar uno de ellos junto a Emilie.
Todo aquello fue antes de que la verdad saliese a la luz. Antes de que iniciasen una relación. Antes de que ya no le hiciesen falta los anillos de la familia Graham.

Guardó de nuevo el anillo en el sitio. El corazón de la azabache latía frenéticamente contra su pecho. Su secreto no podía salir a la luz.
Nadie debería descubrir la verdad del porqué empezó a trabajar para Gabriel... La verdad de la relación que la unía con Emilie.
Salió de la habitación viendo como Gabriel salía de la suya. Tragó saliva corriendo hacia él.

—Que madrugadora... —Susurró medio somnoliento el diseñador mientras se inclinaba sobre Nathalie besando sus labios.

La azabache perdió todo pensamiento, concentrándose en ese beso que estaba compartiendo con Gabriel.

—Siempre he sido madrugadora. —Trazó su pecho con su dedo haciendo reír a Gabriel: jamás se iba a cansar de oírle reír, jamás...

—¿Desayunamos? —Nathalie asintió.

Ambos bajaron hasta la cocina donde Adrien y Marinette hablaban. Se callaron cuando los oyeron entrar.

—¿Ocurre algo? —Preguntó Nathalie mientras veía las caras de preocupación de ambos adolescentes.

—Tenemos un problema. —Dijo la joven de coletas mientras cogía el móvil en sus manos —. Hay un nuevo villano en París pero es algo completamente extraño.

—¿Cómo de extraño? —Preguntó Gabriel sirviéndose el primer café del día.

—No es un portador. No tiene prodigio. Es un humano con poderes sin más. —Declaró Adrien haciendo que Gabriel frunciese el ceño.

Nathalie se tensó. No... No podía ser...

—A ver... —El platinado se movió al lado de Marinette la cual le enseñó el vídeo que los habitantes de París habían grabado la noche de antes —. ¿Y si es un montaje? Hay mucho loco del cine suelto por ahí. —Bebió un sorbo del café mientras miraba al hombre extraño en pantalla soltando rayos de fuego de sus manos.

—Podría ser... No lo sabemos... Solo somos conscientes de que todo París está asustado ante esta nueva amenazada. De momento no ha vuelto a aparecer desde anoche.

—¿Sabéis el nombre de ese hombre? —Nathalie por fin intervino pero mirando la cafetera todavía sin dirigir los ojos hacia los demás.

—Sí... Rassimov... Se hizo llamar Rassimov... —Nathalie dejó caer la taza al suelo asustando a los presentes.

—¡¿Nathalie que ocurre?! ¿Estás bien? Has perdido el color—Preguntó Gabriel ayudándola a salir del desastre de los trozos de cerámica esparcidos a sus pies.

Nathalie lo miró sin llegar a contestar ninguna de sus preguntas. Su corazón se había comprimido dentro de ella. Sabía perfectamente qué estaba pasando aquí.

—No es un montaje... —Los miró a los tres —. Ese hombre me está buscando a mí...

Nathalie salió corriendo de la cocina dejando a los demás con los ojos abiertos como platos.

—Papá...

—No, no sé de lo qué está hablando...

Siguieron los pasos de Nathalie hasta la habitación principal. La azabache ya estaba cambiada con uno de sus atuendos normales de ahora: unos vaqueros y una camisa blanca combinados con unas botas altas.
Su pelo estaba recogido en una coleta; nada de su moño habitual o pelo suelto que solía lucir desde que todo se descubrió.

—Nathalie ¿qué está pasando? —Preguntó la joven heroína haciendo suspirar a Nathalie.

—Coged vuestro prodigios... Creo que me haréis falta.

Nathalie no dijo más. Salió de la habitación. Los tres se miraron sin saber que estaba pasando pero confiando en Nathalie fuese lo que fuese.
Una vez vestidos todos, salieron a las calles parisinas.
El ambiente era extraño, Nathalie sabía muy bien el porqué de aquello.
Rassimov estaba cerca; lo presenciaba.

De repente el cielo se oscureció. Unos fuertes vendavales hicieron que sus cuerpos se tambaleasen. Tenía razón... Estaba aquí... Él la había encontrado...

Un hombre con aspecto mayor se hizo presencia ante ellos. El mismo del vídeo. Su cabello negro ondeaba con el viento mientras sonreía pasando sus dedos por su barba larga.
Miró a Nathalie la cual le desafió con la mirada.

—Volvemos a encontrarnos... —Su acento ruso hizo sonreír a la azabache.

—Hola Rassimov...

—Hola hermana Graham...

***

Bien, aquí os traigo algo que ronda mi mente desde hace dos años JAJAJA y jamás me atrevía a escribirlo porque no sabía cómo pero me he cansado de esperar y aquí os dejo el primer capítulo de una historia que puede ser de todo JAJAJAJA
Para quién no conozca Huntik: es una serie animada Italiana (creo) que amé profundamente cuando la vi y desde el minuto uno he querido relacionarlo con Ladybug, sobre todo con Nathalie y Emilie.
No sé qué saldrá de esto, puede que ni la termine pero mi mente no me va a dejar descansar hasta que os la muestre así que aquí la tenéis y espero que os encante!!!!

Hermanas en dos dimensiones (Huntik&LadyBug)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora