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—La señora de la limpieza quiere traer un chamán —dijo Félix cruzándose de brazos— dice que hay cosas que desaparecen y se mueven de lugar.

Changbin se encogió de hombros, sonriendo.

—Pasas mucho tiempo en la escuela —contestó—, me aburro.

Félix frunció el ceño, pensativo.

—Puedes... venir conmigo —dijo sin mirarlo—, solo si quieres, claro.

Changbin se dejó caer de espaldas en el colchón.

—Lo pensé también, pero no tengo documentos ¿cómo voy a matricularme si no existo?

Lee le dirigió una mirada comprensiva, tomando asiento a lado suyo en la cama, luego de pensarlo un momento se recostó junto a él.

—Puedes solo volverte invisible y pasar el rato conmigo en los recreos, de todos modos, la escuela también es aburrida, siempre estoy solo.

—¿No tienes amigos? —preguntó Seo.

Lo dijo sin mala intención, pero la expresión de Félix denotaba cierta tristeza cuando negó con la cabeza.

—No es la gran cosa —Changbin forzó una sonrisa—, yo tampoco tengo muchos, los otros ángeles de la muerte son antipáticos, y a excepción de ti, los humanos ni siquiera pueden verme.

Lee asintió nuevamente, y la habitación se sumió en un silencio ligero y cómodo, hasta que Félix volvió a hablar.

—Hyung... ¿Cómo conseguiste ese trabajo?

Changbin rió sin humor.

—No es un trabajo, es más bien... un castigo.

Félix rodó de lado para verlo mejor, acomodando sus palmas juntas bajo su rostro usándolas de almohada.

—¿Un castigo?

Changbin se giró también, nunca había hablado con nadie de aquello, los ángeles de la muerte tenían prohibido relacionarse con los humanos, pero ya que los cielos al parecer estaban haciendo una excepción con Félix, él se tomaría la libertad de hacerlo también.

—En realidad no lo sé, no sé quién era ni lo que hice, pero cometí un grave error en mi vida pasada, un pecado tan grande que solo se puede pagar trabajando para el cielo por el resto de la eternidad...

—¿En serio? —cuestionó Félix con los ojos muy abiertos, eso hizo sonreír a Changbin.

—Bueno, no sé si por toda la eternidad, pero sé que la última prueba es la más difícil, muchos ángeles de la muerte tienen miedo y deciden seguir pagando en lugar de enfrentarse a esa última prueba, dicen que es realmente horrible y doloroso...

Félix permaneció en silencio un momento, procesando las palabras del ángel, agradecido de que le hablara con sinceridad.

—Sí... si en el futuro, cuando llegué para ti ese momento... —Félix titubeó—. Si sientes miedo puedes venir a mí —dijo, extendió una de sus manos y la colocó lentamente sobre el rostro de Changbin, al ver que el otro no hacía por alejarse, respiró hondo y continuó hablando, mientras acariciaba la mejilla con su palma—, hay muchas cosas que no entiendo, probablemente no puedo hacer nada para ayudarte, pero estoy aquí, puedo verte, y... incluso si para el resto del mundo no existes, para mi eres real, Hyung.

La mano de Félix era realmente cálida, cálida... pequeña y suave, le hacía sentir tan bien, le hacía sentir como si estuviera en casa, como si perteneciera... cerró los ojos, y en menos de un segundo ya se había quedado dormido.




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El pasto verde picaba un poco en su nuca, pero el clima era agradable, la noche cálida y un viento suave que traí consigo el olor de las flores silvestres, por lo que no tenía la intención de moverse de ahí.

Era una noche realmente mágica, la luna llena iluminaba por completo el prado y las estrellas parecían estar tan cerca que casi se sentía capaz de alcanzarlas si extendía la mano.

Justo pensaba en ello cuando una mano pequeñita se interpuso en su campo de visión.

—Voy a tomar todas las estrellas para ti, Hyung —dijo una voz profunda, y un sentimiento cálido se instaló en su pecho.




c o n t i n u a r á 🔜 

Dark Angel 🔞 [SKZ]《ChangLix》Where stories live. Discover now