Hinata: Del fracaso al amor

Del fracaso al amor

Hyuga Hinata, heredera del clan Hyuga, estudiante de la academia de 11 años ... Otra vez fracaso. Abrió los ojos, mirando el techo blanco de la habitación del hospital, y trató de recordar cómo terminó aquí. Ah, sí. Ella trató de suicidarse. Pero ella falló, una vez más. ¿Cómo podía fallar en una tarea tan simple? Con un suspiro, recordó las circunstancias que la llevaron a la situación en la que se encontraba.

A los 9 años, después de una pelea con su hermana, había visto la decepción en los ojos de su padre, y había demostrado ser demasiado. Solo con fuerza de voluntad, se puso de pie y golpeó a su hermana. Su padre parecía interesado, pero no mucho más. Después de eso, se había entrenado duramente, tratando desesperadamente de obtener la aprobación de su padre. A veces entrenaba toda la noche, usaba pesas, estudiaba durante horas y horas. Todo lo que ella consiguió fueron unos pocos asentimientos. Si estaba haciendo lo correcto, ¿por qué solo recibió un asentimiento de reconocimiento? ¿Dónde se estaba equivocando? Ella comenzó a deprimirse y a odiarse a sí misma. En su autodesprecio, comenzó a lastimarse a sí misma, usando pesos cada vez más pesados, ignorando el riesgo de retrasar su crecimiento, y comenzó a auto mutilarse, todo en un esfuerzo por endurecerse y poder soportar más entrenamiento. Pero después de tantos años de desaprobación, y casi ningún reconocimiento de sus mejoras, se derrumbó. Ella solo podría ser un fracaso al recibir tan pocas pruebas de aprobación, ningún cumplido en absoluto. Ella hizo lo que pensó que era mejor para el clan. Tomó una soga y una vez que era hora de acostarse, se ahorcó. Pero parecía que sus esfuerzos habían sido en vano.

La puerta se abrió, dos ancianos Hyuga entraron en la habitación. Hinata los miró con los ojos vacíos. Estaban indignados, enfurecidos, pero eran Hyugas, y su voz no se elevó más allá del nivel de una conversación mientras le daban un latigazo, culpándola por la pérdida de imagen que el clan podría sufrir debido a este ... incidente. Era la última prueba que Hinata necesitaba, el clan no se preocupaba por ella, su imagen era más importante, realmente era un fracaso. La puerta se abrió de nuevo, un hombre rubio con una cola de caballo esta vez. Pidió a los ancianos que se fueran, respondieron con dureza y se negaron. El hombre rubio chasqueó los dedos; aparecieron dos ANBU y forzaron a los ancianos a salir de la habitación ... más o menos. Hinata miró al hombre cuando se acercó, se sentó junto a su cama y sonrió.

"Hola Hinata-chan, mi nombre es Yamanaka Inoichi. Soy el padre de Ino, la recuerdas, ¿verdad? Ella está en tu clase".

Hinata asintió con la cabeza. Por supuesto que recordaba a Ino, ¿quién no lo haría? Esa chica fue una de las más ruidosas de la historia.

"Bueno Hinata-chan, ¿crees que podrías responder algunas preguntas?"

Hinata asintió nuevamente.

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Hiruzen Sarutobi miró el informe psicológico con el corazón pesado. Había visto uno similar, 5 años antes. La decisión que siguió fue una de las más dolorosas que había tomado. Este, aunque menos doloroso, también fue difícil. Levantó la vista y miró a Hiashi, que estaba leyendo el informe. Se veía pálido. Sarutobi entendió por qué. Hyuga Hinata había sido víctima de una negligencia emocional masiva, su autoestima estaba casi destruida, estaba en una depresión duradera, de al menos un año, y para colmo tenía fuertes tendencias suicidas. Y nadie había notado nada. Hiruzen no podía compadecerse del hombre, había sido él quien había descuidado a su hija así, era su culpa que ella estuviera tan destruida. Lo esperaba, era triste que la pobre muchacha tuviera que sufrir por eso. Con un profundo suspiro, Sarutobi cerró el archivo. Hiashi levantó la vista de la suya, demacrado.

"¿Es ... es esto exacto?"

"Escrito por Inoichi. Creo que es bastante exacto".

"Yo ... ¿Realmente he fallado tanto?"