Padrino-Trueno. (Terminada)

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Un día ya pasó, Mateo está muy
distante conmigo todo el tiempo, realmente no entiendo por qué
Me ha estado evitando, además las veces que intente hablar con el, me contestaba muy abreviadamente, con un si, no creo, no, ajá
Eso es muy raro, ya que el habla demasiado todo el tiempo

Estoy más aburrida de lo normal también, no se en que tiempo estoy viviendo ya que el pensamiento de Mateo besándome aquella noche invadía mi cabeza
No de algo lindo, en realidad, me atormentaba
Quizás si fue una mala idea seguir el beso
Quizás arruine mi amistad con el por ese jodido (delicioso y dulce) beso

Necesito arreglar este problema, no puedo soportar el hecho de no hablarle como siempre gracias a ese beso

Será incómodo? Probablemente, pero, no me importa mientras solucione nuestra amistad y confianza

Con seguridad (y con mi pijama de la sirenita de una tela muy fina puesta encima de mi piel) camine a su cuarto, que queda al lado del mío
Toque la puerta de color marrón con miw nudillos un par de veces antes de que está fuera abierta por Mateo

-Hola, Matu -dije con una pequeña sonrisa en mis labios mientras cerraba la puerta detrás mío-

-Ho-hola Becka -dijo y su nerviosismo ya era presente, pero al darse cuenta intento cubrirlo como si estuviera un actor aguantando su risa- que paso?

-eh, necesitaba hablar con vos... -dije y el desvio su mirada a una pared detrás de mi-

-Becka, estoy muy ocupad...

-tranquilo, va a ser rápido -dije pasando por su lado y rozando accidentalmente su mano con la mia-

Me senté en su cama, cruzando mis piernas y mirándolo, la oscuridad de la noche hacia que haya una dificultad para vernos bien, pero la luna brillaba entrando por su ventana

-sobre que querés hablar? -su vista volvió a mis ojos y conectamos por primera vez en dias-

-veni -dije palmeando la cama, el se acercó y se sentó- bueno... Mira...

Intenté seguir pero no pude
Solté todo mi aire en un frustrante suspiro y me acomode en la cama buscando las palabras adecuadas para decir

-mira... Bueno, Matu, estuviste muy distante conmigo ayer y hoy, desde.... El beso -susurre las últimas palabras-

Su cara cambio bastante, sus pupilas estaban dilatas, sus ojos mas abiertos que nunca, ya que es bastante chino y sus cejas alzadas
Si miraba sus ojos detenidamente podía ver el miedo que sentía, y en realidad no se por que miedo, esa era una sensación que me daba el ver sus ojos
Desvío la mirada de mis ojos a la alfombra junto a su cama, evitandome

-mierda -rode los ojos, el no hablara, y lo sé-

Con los dedos de mi mano, suavemente corrí los pelos de mi cara y acaricié su mejilla
El me miró, aquellos ojos marrones cruzaron miradas con la mía, debilitando mi tacto y enfocándome solo en sus ojos

Los segundos parecían minutos, quizás horas
Pero viendo esos ojos, esos malditos ojos, mi tiempo se perdía y no me importaba, pero tampoco tenía noción de lo que sucedía o sentía

No entiendo por qué mi corazón late tan fuerte, lo puedo sentir, como si hubiera kilómetros
Y como si todo a mi alrededor se desvaneciera con tan solo mirar sus ojos, sus malditos ojos

Al ponerme nerviosa, de alguna manera saco mi mano de su mejilla

-Mateo, sabes que si pasa alg...

-si, ya lo se -dijo haciendo una pausa por su voz cansada- "puedes contarmelo todo'

Dijo imitando mi voz, mi ceño se frunció ante sus palabras