Primero que nada, ¿Cómo estás?.
Seguramente me dirás algo como bien, sigo vivo y eso es lo que importa. Pero yo sé que no fue así, puede que hoy sí., pero la mayoría del tiempo seamos sinceros, no es así, y tú respuesta honesta sería como la mierda., tienes muchos problemas, ¿No es verdad?... Ja!, Problemas... Es una palabra que todos usamos y bastante, y por ende en algún punto llega a perder su valor y se convierte en algo vacío., Y eso lo único que llega a ocasionar es que los demás también se lo tomen como un simple juego. Pero seamos sinceros ¿Qué otra cosa harían?, ¿Tomárselo en serio?, Eso no pasaría, y por que, simple por dos cuestiones, una no les importa y dos eso les da miedo y en realidad a nosotros nos da miedo que se lo tomen enserio, ya que eso lo haría real, ¿Verdad?
Cuando hablamos de que no nos está yendo excesivamente bien, ¿Cuál es la respuesta que damos?. Les puedo apostar que en sus palabras, sean cuales sean, las emociones predominantes serían envidia, odio y el despreció., Ésto porque simplemente no estamos como aquella persona, porque nosotros sentimos que deberíamos estar igual o mejor que él o ella. Y seamos sinceros lo primero que me responderías a lo que dije, sería algo como:
-Es bueno que le esté yendo bien, es bueno alegrarse y sentirse bien por esa persona. Además eso te mejora como persona.
¡Patrañas!
Seamos sinceros, no te alegras por la otra persona, simplemente tratas de mentirle, para que sienta cierto reconocimiento y le agrades. Ya sabes lo típico:
-Voy a hacer esto para caerle bien, además lo haré de la mejor manera para que reconozcan mi esfuerzo!.
Es complicado, el descubrir realmente el porque nos sentimos de está manera, y lo que argumentaran algunos estudiosos es: -Es normal sentirse así, sentir de buenas a primeras esos sentimientos negativos. Y lo que yo argumentaría: -¡A la mierda si en normal o no!, porque mierdas te tienes que sentir mal por ver a alguien crecer y salir adelante. Y lo que pensé fue: Fácil, por que él tiene algo que yo quiero, y por ello me enoja que alguien más me lo quite, PORQUE ES MÍO. Vaya cuanta envidia, ¿No?
Somos seres envidiosos , envidiamos lo que el otro tiene o quiere., Desde pequeños, lo recuerdas... Cuando tú tenías algo, un juguete, unas papas, un amigo, una prenda de vestir. No querías que fuera de nadie, más que tuyo. A pesar de que ya no juegas con ese juguete, de que ya te hartaste de las papas, que le hiciste cosas horribles a tú amigo, de que no te volviste a poner esa prenda de vestir. No querías que nadie te lo quitara, no querías compartirlo. Tal vez porque el cariño que le tenías a esa cosa o persona, te impedía que lo compartieras. Porque desdé pequeño tú bien sabías que nadie lo cuidaría como tú. Y que pasaba cuando le prestabas eso que más querías a alguien más., Te lo rompió, ¿No es verdad? Lo dañó, le hizo algo que te molestó. Y cuando se lo quitabas, ¿Cuál era su respuesta? -¡Que envidioso eres! Lo recuerdas, ¿No es verdad?, No solo pasa en la infancia. Puede que te haya pasado hace unos días, meses o años, y puede que no necesariamente con un juguete., Pero recuerdas ese sentimiento...
al final los seres humanos somos tan sencillos como queramos ser, pero al mismo tiempo somos tan complicados como nosotros mismos.
