La Joven CEO

CAPÍTULO 1

No fue fácil llegar hasta este punto. La idea de lograrlo era simplemente utópica, milagrosa, intangible, imposible. Lo afortunado de la imposibilidad es que solo debemos quitar ese pequeño prefijo y todo, TODO se vuelve posible. Quizá te preguntes de qué estoy hablando y porqué decidí relatar esta historia. No será fácil, no lo fue para mí, pero si lees con detenimiento quizá entenderás las decisiones que me han traído hasta aquí. en ese entonces era joven, aun lo soy, pero era mucho más joven que ahora. Mi amor por la música y por él me levantaba cada día de la cama, escuchar su dulce voz era la vida misma. Quizá exagero, pero soy una gran fan, y así empezó todo.

- ¡Sofi! – gritó una vez más- si no te apuras llegaras tarde.

- Yo nunca llego tarde – dije. Le di un beso a mamá y salí corriendo de casa. Subí al autobús y conecté los audífonos. Era como un susurro, precioso, apacible, me relajaba en seguida. Era Taehyun, mi cantante favorito. Lo conocí gracias a una amiga. Podría decirse que ella me introdujo al mundo del entretenimiento asiático, de los idos, de las mascarillas coreanas, de los programas de variedades, entre otras cosas. Él es simplemente perfecto, no se si es exagerar, pero sentía que lo conocía y que su sonrisa iluminaba mis días.

- ¿Otra vez soñando? – dijo Natalie apenas crucé la puerta del café.

- ¡No es un sueño! Mi amorcito es real. – reí- Es más, verás qué rápido nos vamos las dos a Corea del sur a conocerlo, y de paso ves a tú Minho.

El rostro de Natalie siempre se iluminaba al escuchar de Minho y todavía más si se agregaba ese posesivo "tú" en la misma oración.

- ¡Ay si! ¡por favor! Aunque de cualquier manera si no me llevas tú, ya te llevo yo, por eso soy la mejor barista de esta ciudad, me atrevería a decir del país. - Su pecho se henchía de orgullo, pero no podía refutar eso. Su café era el mas delicioso y fragante que había probado.

-Sí, barista, contadora, administradora, gerente, asesora de turismo, Magister de marketing, ...

-Ya vas a empezar, si si ya se que he tenido muchos trabajos y he participado en muchas cosas, pero no fui la mejor de la clase, ni en la escuela, ni en el bachillerato, ni en la universidad, ni mucho menos quince empresas internacionales me pidieron, no, me suplicaron entrar en sus empresas como socia.

- claro claro, no nos echemos en cara esas cositas. No es lo mío, lo sabes. Disfruto de mi independencia. – Mi rostro ardía. Solo de acordarme de ese tiempo donde decidir significaba cambiar totalmente la manera en cómo había vivido, dejar el país, a mi madre y demás, fue terrible. No me negué por creer que yo era mucho, sino porque sabía que mi inexperiencia era algo que me limitaría y me haría auto sabotear una oportunidad tan buena como esa. Detesto la idea de que puedo defraudar a las personas, hacer que pierdan su fe en mí.

Dejamos de bromear y comenzamos a trabajar. logramos en poco tiempo colocar un pequeño café de apariencia moderna pero acogedora y nos turnábamos en los oficios por hacer. Sin embargo, rápidamente nos fue necesario contratar a tres personas más. Todo cambió cuando por sugerencia de Natalie decidí invertir un dinero que tenía guardado en inversiones del mercado internacional. Poco a poco logré triplicar lo invertido, y para cuando lo recuperé, seguí realizando negocios con las ganancias.

- ¿ya te llegó la notificación? - preguntó mamá.

-Si- enmudecí.

-Y ¿entonces? - inquirió ella.

- Todo salió según lo planeado. - no dije más. Tomé el bolso y agradecí al cielo que mi mamá no fuera de esas madres "curiosas" que no te sueltan hasta hacer en interrogatorio de tu vida desde el nacimiento.

Llegué rápidamente al café. El trayecto se hizo inusualmente rápido y desafortunadamente para mí, Natalie no era ni remotamente parecida a mi madre.

- ¡Hasta que llegas! - me tomó de la mano y como si yo fuese una niña pequeña, me llevó hasta una silla que estaba cerca. – Cuéntamelo todo, pero cuando digo todo es, TODO.

-Todo- repetí. -Todo fue bien, las cosas salieron como esperaba, solo que ahora no se muy bien qué hacer.

-Detalles, dime detalles. Cuando te dije que todo, hablaba en serio. – ella sabía que yo tendría que decirle todo, solo debía lanzarme esa mirada autoritaria y yo se lo diría todo. Incluso lo que no quisiera confesar en voz alta. Ella tenia ese efecto en mí, por eso éramos mejores amigas, hermanas.

Respiré profundo y comencé.

-prácticamente soy millonaria ahora. Bueno no estrictamente millonaria, ¿multimillonaria? ¿quizá? - sabia perfectamente que sonaba tonto, sonaba arrogante, sonaba imposible y no sé cómo describirlo exactamente. Pero así era. Natalie me miró y asintió, para mi alivio no parecía dudarlo sino saber de forma precisa cómo sucedió y lo que yo pensaba.

- Ya te había comentado que había seguido tu consejo y había invertido en varias empresas internacionales, quizá lo que no te dije fue que también coloqué parte del dinero en la bolsa y moviendo regularmente el dinero, hice más de lo que esperaba. En resumen, ahora podría colocar diez mil sucursales de café y aun así no se acabaría lo que logré ahora. - suspiré.

- y ¿Qué te preocupa? veo que algo te preocupa. Dime ¿Qué es? - me leía tan bien.

-En broma hablábamos de irnos a Corea y ahora tenemos esa posibilidad. Pero cuando investigué a las empresas y sus finanzas para hacer la inversión, me enteré que KJEntertaintment está siendo investigada y al parecer van a cerrarla. Cancelarán los contratos de todos sus grupos y cantantes solistas. No van a poder usar sus nombres tampoco en otra agencia porque todo está sujeto a la empresa, en pocas palabras. Van a tener que empezar de cero, no los van a indemnizar, no habrá pagos por rompimiento de contratos, ¡Nada! Los van a dejar literalmente en la calle y tampoco podrán usar sus nombres de nuevo.

- ¡eso no es posible! Haber hagamos una pausa. KJEntertaintment es o al menos es aparentemente una empresa que vale más de doscientos ochenta y siete mil millones de dólares y recibe el triple de ese dinero en ganancias al año. ¿Cómo me vas a decir que está en bancarrota y peor aún, que todos sus artistas quedarán sin nada? - me miró casi horrorizada.

- ¡Lo sé! Yo tampoco lo creí al inicio, pero tu me conoces y sabes que yo no dejo la información importante sin confirmar.

Ella asintió y se quedó sin palabras. Solo por dos segundos enmudeció y lanzó la gran pregunta.

- ¿y qué planeas hacer? Porque estoy segura que ya planeaste algo.

-quiero salvar esa empresa, quiero decir puedo salvar KJEntertaintment. Tengo la manera de hacerlo, solo hay un problema. - la voz se iba de mi de solo pronunciarlo o pensarlo.

- ¿Cuál? No me dejes así, por favor, dime que problema hay. - Natalie me miraba llena de expectativa.

-Necesitan un nuevo CEO.