La acción

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Hola bueno pues volvemos con esta advertencia, si quieres conservar tu inocencia no leas esto, aunque bueno si lo quisieras hacer no tendrías Wattpad, bueno ya empezemos.
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-Contigo hasta donde sea- Decía Rubius con un tono seductor

Los dos subían poco a poco las escaleras mientras se besaban y comenzaban a quitarse la ropa.

- Espero que ahora ya nadie nos molesté- Decía Vegetta mientras se comenzaba a colocar encima de Rubius

-Vegetita por favor hazlo con cuidado recuerda que no me gustan las marcas- Rubius

-Claro Osito solo déjate llevar- Vegetta

Vegetta tomo las manos de Rubius mientras lo empezaba a besar en el abdomen

- Vegetita - Decía Rubius soltando un pequeño gemido

- Osito pero si aún ni empiezo...- Decía Vegetta con un tono muy sexi - Te volveré incluso más loco que hace un rato

Vegetta comenzó a lamer el pene duro de Rubius de una manera algo acelerada pero a la vez suave.

-V-Vegetta- Decía Rubius arqueando la espalda y sintiendo aún más placer ya que todavía se encontraba sensible

-Rasguña todo lo que quieras osito recuerda no te contengas el momento es para los dos - Decía Vegetta mientras se separaba y subía hasta la cabeza de Rubius dónde comenzaba a dar ligeros chupetones en el cuello de Rubius

- Vegetita me encantas pero quiero sentirte dentro de mi quiero que seamos uno mismo- Rubius

-Esta bien Osito lo haré con cuidado- Decía Vegetta mientras se quitaba el pantalón, con su cinturón amordazo a Rubius y comenzó a meter su pene.

Inmediatamente Rubius soltó un gran gemido y abrió los ojos drásticamente.

- Vegetita!- Decía Rubius con otro gran gemido

- ¡Dios mío! Eres perfecto en cada rincón de tu cuerpo- Gemía Vegetta mientras movía su cadera de unas maneras que volvían loco a Rubius.

Cada que Vegetta lo penetraba sentía como su cuerpo se expandía y se amoldaba a el cuerpo de su amado y sus maravillosos 20 cm.

Vegetta tomaba con firmeza la cintura de Rubius que se acomodaba perfectamente a sus manos, la unión que tenían era perfecta incluso mística, aunque llevarán poco tiempo conociéndose en ese momento sintieron como si se hubieran conocido desde anteriores vidas, ellos no estaban teniendo sexo ellos estaban haciendo el amor...

- Metemela más duró porfavor, más rápido, necesito sentirte, ¡Dios! Siento como llenas cada centímetro de mi cuerpo- Gemía Rubius entre suspiros

-Tus deseos son órdenes Osito- Gemía Vegetta al oído de Rubius

Vegetta puso una mano sobre la cama para apoyarse y comenzó a penetrar a Rubius de una manera escandalosa; los fluidos,los gemidos y el choque de sus cuerpos generaban un sonido ensordecedor que era como una melodía para ambos.

Vegetta se dejó caer sobre Rubius comenzando a llenar su cuerpo de besos pero siguiendo penetrando a la misma intensidad, en ese momento ya nada le importaba y comenzó a dejar chupetones por todo el cuerpo de su osito desde la pelvis hasta el cuello dejando un rastro húmedo, Rubius solo podía gemir ante tal estímulo que lo estaba consumiendo y no sabría cuanto podría seguir así.

Vegetta tomo el cuello de Rubius firmente algo que parece extremo pero solo encendió más a los dos, su cadera no cesaba de moverse y moverse, su pene se endurecía más y más y el ambiente se humedecía a cada segundo, todo estaba envuelto en un ambiente lleno de deseo, amor, exitación, locura, placer y muchos pero MUCHOS fluidos.

- ¡Dios Rubius creo que me voy a correr!- Gemía Vegetta aumentando cada vez más y más la velocidad y constancia de sus penetraciones

- Ah- ¡AHHH! Creo que yo también me voy a correr Vegetita, porfavor no pares quiero sentir tu calor, dámelo todo te lo ruego- Decia Rubius mientras los gemidos no paraban de interrumpirlo

Vegetta sacó rápidamente su pene y después de unos cuantos segundos empapó la cara de Rubius con semen.

- ¡AAAAAhhhhh!- Gimieron los dos al unisono terminando al mismo momento, Vegetta en la cara de Rubius y Rubius sobre su abdomen.

- Dios Vegetita... Eso.. fué maravilloso- Decía Rubius mientras se recostaba y trataba de calmarse

- ¿Fué? Cari si esa solo fue la primera ronda yo hago mínimo tres- Susurraba Vegetta a Rubius mientras se le volvía a poner encima y comenzandolo a besar de nuevo

- No, no Vegetita tu eres un Súper Gay tu ya estás acostumbrado yo soy un nuevo gay, con esto tuve para toda la semana- Decía Rubius mientras se acomodaba el cabello

- Dios con esa carita no te puedo llevar la contraria... Pero déjame darte una mamada más ¿vale?- Vegetta

- Tus deseos son órdenes- Decía Rubius mientras bajaba la cabeza de Vegetta







Una venganza que originó un AMOR ❤️ (FINALIZADA)Where stories live. Discover now