Los juegos del amor.

Capítulo 8: Voy por ti morena de ojos azules.

(Pov Ian)

Mierda.

Un sueño.

Más bien una pesadilla.

Una jodida pesadilla.

Me he quedado dormido en la oficina, ¿Qué hora es?,  me fijo en el reloj de pared que está a un lado de la puerta, ¡Demonios faltan 10 minutos para verme con Leah!, solo espero que no sea igual de mala que mi sueño.

Me levanto del sofá, salgo de la oficina y me subo al BMW i8 blanco, puede sonar triste, pero este auto es mi vida entera, al fin y al cabo ya no hay nadie que importe en mi vida.

Silgo del estacionamiento y me voy directo al restaurant de siempre, un restaurant sencillo pero sofisticado, al que empecé a ir desde que tuve la relación con Leah.

Me dirijo al mostrador, le doy mi nombre al hostess*, este me dirige a una mesa en donde hay una rubia hermosa, con ondas en el cabello y un vestido color cian, pero lo malo es que esa belleza no es de mi  agrado y  no disfruto de su compañía, le agradezco al hostess y me siento en frente de la rubia.

-Hola, pensé que ya no llegabas- tiene un tono recriminatorio pero a la vez divertido-  espero que no te moleste, he pedido por ti.

-No te preocupes, no hay problema, perdona el retraso, he tenido mucho trabajo en la oficina- aja, trabajo.

Cállate ya.

Ok, ahora, a lo que viniste, termina a la rubia.

No seas idiota, tú mejor que nadie sabes que eso es imposible, o al menos hasta que me firmen el contrato, solo espero que no falte mucho para eso.

-Bueno Leah, ya estoy aquí, dime porque estamos aquí.

-Tengo 2 noticias que darte, la primera es esta- ella mete la mano a su bolso buscando algo, entonces veo que saca un sobre ¡Demonios!, la pesadilla se hizo realidad.                                

Cálmate, no seas paranoico.

¿Y el sueño que?

Es solo un sueño idiota, ahora hazle caso a la rubia.

-Ten, ábrelo- me sonríe cálidamente y  entonces empiezo a ponerme nervioso, tomo el sobre que me tiende y lo abro.

Dios.

No lo puedo creer.

¡Firmaron el contrato!

Poco a poco una sonrisa se va extendiendo por mi cara y estoy casi seguro que es tan grande que me parte la cara en dos.

-Sabía que te gustaría, en la mañana me llamaron los de arriba*  y me dijeron la noticia, yo quería ver tu cara así que les pedí que me dejaran entregártela y accedieron gustosos.

-Oh, Leah, no sabes lo maravillosos que es esto par mi-con esta nueva noticia me siento capaz de preguntar lo que sea- Leah, ¿Qué es lo que tenías que decirme, la segunda noticia?- ella hace una mueca, pero después sonríe con anhelación. 

-Bueno, he venido a decirte, que…..he……bueno, terminamos- abro  los ojos como platos de la sorpresa y ella se apresura a explicarme- Ian, tu y yo sabemos que esta relación solo era sexo y en parte el contrato, ya te han firmado el contrato y  la parte del sexo, estoy segura de que no tendrás problemas en encontrar un cuerpo caliente, la verdad es que no tenía problema en seguir con nuestra relación, pero….he conocido a otra persona, alguien con la que creo, soy capaz de establecer una relación, tal vez esto te tome de sorpresa o quizá a lo esperabas y bueno ojala lo entiendas.

-Leah, no sabes cuánto me alegro por ti, de verdad, no me lo esperaba pero creo que es lo mejor, mereces a alguien que te dé estabilidad y yo no soy esa persona, así que soy tremendamente feliz por ti.

-Gracias-Leah se levanta de la mesa, me da un beso en la mejilla y se va.

Lo único que puedo pensar cuando ella se aleja es: “VOY POR TI MORENA DE OJOS AZULES”

*Hostess: Persona que te recibe al entrar al entrar a un restaurante.

*me llamaron los de arriba: expresión utilizada para referirse a que los jefes de la empresa la llamaron.

Volví muajajajajajaja, como ya les dije, publicare hasta el siguiente fin, en México es de noche así que ¡Buenas noches amores míos! :**