DANGEROUS LOVE (EDITANDO)

PUNTO DE QUIEBRE PERAYA (PT.2)

Dos semanas habían pasado desde aquella cruel despedida, Krist se quedaba en casa de sus padres mientras Singto estaba encerrado en su oficina sin querer hacer nada, Krist había pensado mucho y finalmente llego a la conclusión de que ya no podía seguir en aquella relación así que suspirando pesado compro un boleto de avión, quería irse lejos, donde Singto no estuviera

-Estas seguro que es lo que quieres Krist?- Gun tenía tanto miedo de que su amigo estuviera tomando una decisión apresurada pero este se veía mas que decidido así que ese día sin previo aviso se fue del país, Singto se entero solo días después pero no hizo nada, no pregunto a donde había ido o su numero de celular pues sentía que Krist merecía algo mejor que él, ya le había causado tanto daño que no merecía el amor de aquella persona tan buena

Los meses pasaron, Krist y Singto no había vuelto a hablar y ninguno sabia del otro, Gun hablaba con su amigo de ves en cuando pero Krist nunca pregunto por Singto aunque moría por hacerlo

-Hoy no estaré para nadie así que no llamen- Singto envió aquel mensaje a todos sus amigos y estos sabían el porque, aquel día era el día en que se llevaría la boda de Singto y Krist, Singto no fue el unico que lo recordó pues Krist moría por marcar aquel número pues de alguna forma tenia un mal presentimiento así que luego de pensarlo mucho termino por marcar aquel número pero no recibió respuesta, no importo cuantas veces llamo, nunca contestaron entonces la llamada de Gun le heló la piel al escuchar el motivo de la llamada.

Singto había estado en su oficina todo el día y cuando la noche llego decidió solo ir a tomar un trago pero finalmente no lo hizo pues estaba tan deprimido que el trago no se veía para nada provocativo entonces decidió ir a casa, subió a su moto y coloco el casco, encendió motores y se fue pero en el camino sus lágrimas empezaron a rodar y los recuerdos vividos empezaron a llegar como torrentes, se sentía la peor persona del mundo, sentía que había sido el imbécil mas grande del mundo y que su vida se había ido con Krist, en medio de aquellos pensamientos olvido que iba conduciendo y no se fijo en aquel semáforo en rojo y al cruzar este su moto choco con un auto que venia a gran velocidad, su cuerpo salio volando y choco contra un poste de luz, por su frente rodó una espesa capa de sangre y poco a poco perdió la conciencia, al llegar al hospital se contactaron con la familia de Krist pues en el celular de Singto los nombres Padre y Madre eran los padres de Krist quienes corrieron al hospital pues en tantos años y sin importar los hechos anteriores amaban a Singto, pronto informaron a sus amigos pero no le informaron a Krist así que fue Gun quien decidió llamar

-Hola?- Krist habló un poco confundido, era extraño que Gun le llamara a esa hora

-Krist...- El nombrado casi al instante reconoció que Gun estaba llorando y su cuerpo se tensó

-Que... Que paso?- Krist no estaba preparado para recibir noticias tristes pero sabia claramente que aquella llamada no era para algo bueno

-P'Sing... P'Sing esta muriendo...- Casi como si aquellas palabras fueran balas a su corazón sintió que moría son aquellas simples palabras

-Que?- Su mente y corazón trataban de asimilar la noticia pero como asimilar algo así?

-Iba en la moto y se estrelló con un auto, al parecer iba distraído y se paso un semáforo, los médicos dicen que esta en un estado crítico y que... Debemos estar preparados para cualquier noticia- Krist entonces dejo caer el celular en sus manos mientras sus lágrimas rodaban como niño chiquito, solo fue cuestión de horas cuando Krist estaba tomando un avión de regreso a Tailandia, las horas fueron eterna para él y al llegar se encontró con la noticia de que Singto estaba en coma.

15 meses después

Krist observaba la hermosa mañana desde una habitación de hospital, en la cama estaba su amado dormido como cada día, la vida de Krist se había vuelto una rutina diaria, ir a casa, bañarse, comer y volver al hospital, sus amigos estaban preocupados pero no había mucho que pudieran hacer, era la decisión que Krist había tomado

-Krist necesitamos hablar contigo...- Los padres de Krist lucían serios y poco animados así que Krist decidió escucharlos y salir de la habitación para no perturbar la paz de la persona que yacía inconsciente

- Que pasa?- Krist pregunto incrédulo pero no esperaba lo que sus padres iban a decir

- Krist... Ha pasado mas de un año y Singto no da señales de vida... Tu... No creas que no nos duele verle así y verte así... Lo hemos hablado mucho y... Creemos que lo mejor es dejarle ir...- Con aquellas palabras Krist sintió que sus padres le fallaban y le traicionaban

-Que? Dejarlo ir? A donde? No lo voy a permitir- Krist estaba firme en su postura, no perdería a Singto, ya ni siquiera pensaba en aquella traición, lo único que quería era que él despertara y vivir juntos de nuevo

-Krist... Lo van a desconectar...- Krist abrió sus ojos como platos y empezó a negar mientras lloraba como un niño chiquito

-No! No lo harán, no me lo van a quitar, no lo harán!- Krist no paraba de llorar y sus padres trataban de consolarle pero al final fue en vano, Krist volvió a aquella habitación y juró que no lo alejarían del mayor, la noche llego y Krist observaba a su amado quien solo parecía dormir

-Por favor... Por favor vuelve conmigo... Yo... Ya te perdone, no importa lo que paso si? Por favor no me dejes...- Sus lágrimas no dejaban de rodar y era un bebe abrazando a su amado y en medio del llanto escuchó una suave voz que le susurro un

-No me iré...- al escuchar aquello el menor de los dos se separo muy lento de su amado y sintió que su Corazón iba a estallar de felicidad, sus lágrimas rodaron con mas fuerza aun y corrió a llamar a los médicos, Singto había despertado, todo parecía estar bien y Krist no se separaba de Singto ni por un momento, luego de tanto el mayor por fin había despertado

-Si vuelves a hacer esto en verdad me iré muy lejos de ti- Hablo Krist quien ahora estaba a solas con su amado

- No lo haré, ya descubrí el infierno que es no tenerte conmigo- Singto sonrió suavemente y finalmente un beso sello la promesa de aquellos amantes que no se volverían a separar sin importar los obstáculos de la vida