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˗ˏˋ 𝙱𝚞𝚖𝚙𝚎𝚛 𝙲𝚊𝚛𝚜 ˎˊ˗
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Durante el carnaval, Felicia había conseguido varios clientes al punto de agotarse todos los boletos que Fez le había dado para repartir al rededor del área, ahora era el momento de divertirse después de aquel momento incómodo con Jules y Cal Jacobs, decidió que estaba de más, era la tercera rueda, el extra en el plano, así que lo mejor era que se fuera aunque estuviera sola, en el camino que tomó para los carritos chocones que era el primer juego al que se quería subir por tener buenos recuerdos del mismo, se encontró con Cassie en el carrusel que estaba teniendo un orgasmo por alguna razón, pensó en ir a saludarla antes de que eso ocurriera pero segundos después lo pensó dos veces y siguió derecho, unos pasos después vio a Kat, pero la pelinegra estaba tan centrada en lo que fuera que iba a hacer, que no se dio cuenta de la presencia de la rubia, Fel no le dio importancia y siguió su camino, después vio a un Nate Jacobs se dirigía a un rincón con Maddy.
Seguramente van a coger. Pensó Felicia, pero estaba totalmente equivocada.
El atuendo ajustado de un corset de látex lila y falda blanca que había elegido estaba comenzando a ser incómodo, el frío comenzaba a golpear con sus desnudos hombros y las miradas de amas de casa con miedo de que sus esposos vieran a Felicia no tardaron en llegar, la rubia las paso por alto, odiaba llamar la atención, ahora que había terminado con todos los boletos que Fez le había dado, esas miradas ya no le servían, pero no trajo un repuesto así que se tendría que soportarlo.
Felicia observaba que cada uno de sus amigos o conocidos, todos estaba en lo suyo pero en el mismo lugar, era curioso que todos llevaran una vida individual, se sentía extraño pensar que tenían vida más allá de ella, sin duda era egoísta pensar así pero Lizzie ya había romantizado su vida, cada aspecto de ella, desde su adicción hasta su forma de caminar, sabía que estaba mal pero le ayudaba a sobre llevar con la mierda que cargaba. Hablando de mierda, la ojiverde había logrado estar sobria durante toda esa noche, pero ya era ora de darse un viaje, entró a los baños portátiles, lo cual le resultó bastante desagradable por varias razones, sin embargo no podía pasearse por allí inhalando Vicodin sin preocuparse de ser vista.
