Chapter 19

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–Saldré ahora –avisa el fantasma, acomodando su camisa. Detiene sus pasos, esperando escuchar a la mujer despedirse.

–Vale –contestó sin ningún interés más allá, hoy tenía planes. Sus ojos estaban en la revista de farándula que había comprado esa mañana cuando fue a la tienda.

–Nos vemos –con algo de desilusión, con las esperanzas de que ésta se pusiera de pie y le besara, se despidió.

–Adiós. –cortante y tajante. Ahora es donde se cuestiona si fue buena idea besarla. La adicción a sus dulces labios incrementó después de dos días besándola con normalidad.

Suspira desganado, chasquea los dedos y desaparece del campo de visión de la chica. Esta suspira.

–Lo lamento, pero no quiero tener remordimientos hoy –susurró, tecleando en su teléfono. La revista de la farándula pasó a estar en el piso, sus piernas enrollándose en su pecho, sintiendo cosquillas ya en su vientre.

Busca el número de su productor y lo marca. Al tercer tono alguien contesta. Las cosquillas incrementan más, y un pálpito en su zona íntima le hace acercar más sus piernas a su pecho cuando la voz grave de su productor se hace escuchar.

–¿Thanie? –preguntó la voz en la otra línea.

–Ven a casa, hoy te pago la deuda con Naeh –anuncia.

–Uh... –del otro lado, alguien sonríe– Estaré ahí en quince, solo déjame pasar a buscar algo –avisa. YoonHa muerde sus labios, asintiendo sin ser vista.

–Vale, le aviso a Naeh.

Colgó la llamada con algo de nerviosismo, hace mucho que no mantenía alguna relación sexual que no fuera meramente eso, sexo. Últimamente con su novio no pasaban de los besos y para una persona que es activa sexualmente, es frustrante.

Despeina sus cabellos mientras con una mano busca a su mejor amiga entre sus contactos. Sonríe al encontrarla.

Teclea rápidamente en los mensajes, llenándola de estos hasta que aparecen el ya conocido, punto verde. Ella responde con un simple "Ok" que le hace entender que ya todo está listo y que no hay vuelta atrás.

Corre a su habitación para darse una ducha rápida, limpiando bien su cuerpo para el gran momento, saliendo en toalla a recibir a su mejor amiga cuando termina de bañarse y su puerta es tocada.

–¿Nerviosa? –preguntó con una sonrisa en su rostro.

–Sí ¿Y tú? –la chica frente a ella asintió– Hace mucho que no tenemos encuentros con él –ríe.

–Sí, y con YoungChul nunca se sabe qué hará –suspira– Pasa –la invita, recordando que sus vecinos la podían ver en toalla y crear polémica.

–Gracias.

Chaewoon se sienta en el sofá del salón de la chica, mientras que la dueña de este se va a su habitación. La sigue con la mirada.

–¿Crees que sea buena idea anticipar algo? –preguntó desde la habitación.

–No lo sé, yo por si las dudas me pondré el collar que nos dio antes –comentó la chica mientras se ponía la lencería color negro antes del arnés.

–¿Me dejas cambiarme igual? Olvidé ponerme la ropa de lo ansiosa y la traje –Chaewoon esperó respuesta.

–Claro, pasa.

La chica entró en la habitación de su mejor amiga, encontrándola en solo una pequeña lencería color negra, su tela transparente dejaba poco para ocultar.

A dos cartas |Park JisungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora