،̲،̲ -Hola de nuevo, Sanggie- Seonghwa estaba delante de él, con su sonrisa, esa maldita sonrisa. -¿Qué quieres?- Sus palabras sonaron frías, el olor a alcohol se sentía demasiado. -¿Estas bebiendo, Yeosang?- El más alto de ambos se acerco y aspiró su aroma. -Que te importa ¿a qué viniste?- Sus ojos estaban fijos en él. -Volví por eso- Apuntó dentro del departamento, unas llaves se encontraban arriba de la mesa. Yeosang tomo las llaves y se las entregó. -Adiós- Parecía que Seonghwa abrió la boca para hablar pero Yeosang no se lo permitió, cerro la puerta en su cara y se fue a su habitación, se envolvió en las sábanas y simplemente... lloraba.
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