Se acercaba una tarde de pereza y bostezos donde el reloj marcaba las 12 del día, era una tarde gris a pesar que el sol marcaba todo su esplendor, el café y los cigarros eran eternos, igual que las constantes predicciones del tiempo con respecto a las lluvias de medio día.
Llenando la taza con un poco más de café, nuestro personaje de hoy retoma su lectura a ver si esta lo retorna aun mundo no tan real, ve en el teléfono el mismo número llamando y hace el mismo gesto para ignorarla.
Ella se estira y ve que su llamada es rechazada de nuevo, ya no la enoja ni l extraña, solo la entristece, al compás de Sinatra, vuelan las ideas de que estará haciendo, ya habrá comido, tendrá ganas de esos monchis que ella hacia después de fumar. No lo sabía.
De una manera extraña el pronóstico del tiempo es acertado y empieza llover a eso de las 6 de la tarde, en la mente de nuestro personaje de hoy se visualiza el sabor del café, amargo pero gustoso, liquido pero con cuerpo, rosado, suave... esperen esto ya no es café, de un momento a otro empezó a pensar en los labios de la mujer de las llamadas:
- son tan amargos como el café, pero tan satisfactorios como el mismo.
Recordó que le dijo eso hace mucho, y engañado por su conciencia, fue a la cafetería donde solían pasar juntos.
Ella entra en la escena, de todos los lugares donde pudo pasar la lluvia tenía que entrar en la cafetería que solían residir juntos, y ver que aún estaba el letrero en papel hecho por una de las camareras que decía: ¨reservado para sol y luna¨.
Tuvo el impulso de quitar aquel cartel hasta que se dio cuenta de que había alguien ahí sentado, y en la orilla de la mesa una taza de café vacío y una botella de whisky por mitad, aquella silueta que ella reconocería donde sea sostenía una pluma mientras miraba algún tipo de cuaderno.
Ella se acerca lentamente y mira lo que está escribiendo:
No puedo reconocerme ni reconocer lo que te he hecho
Y es que contigo mi vida no dejo de ser miserable pero empezó a ser alegre
Claro que te amo, si no lo hiciera el dolor no sería tan fuerte
Quiero volver a estar a tu lado
Sea en el momento más horrible o en el más brillante presente
Porque mis versos son basura sin tu belleza
Y el odio el resentimiento son, son son son
Al parecer nuestro protagonista se había detenido a llorar un rato.
De repente al frente de él ve como la pluma se eleva por una mano femenina, y con una caligrafía que distinguiría en cualquier lado y sobre todo por las notas que ya le había escrito antes como:
¨te amo, pero si vuelves a dejar las ollas sucias te cortare el pene así me haga feliz. Besos¨
Vio como con esa misma letra de notas tan románticas ella reescribía su verso con lo siguiente:
Y el odio y los resentimientos son todo lo que la lluvia se llevó.
Lo siguiente en nuestra obra son dos jóvenes bailando bajo la lluvia...
¨And find I'm king of the hill
Top of the heap
These little town blues
Are melting away
I'll make a brand new start of it
In old New York
If I can make it there, I'll make it anywhere
It's up to you, New York, New York
New York, New York...¨
*fragmento de la canción new york de Frank Sinatra
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