Un nuevo mundo: el Imperialismo y la globalización

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En la Unidad 1 del programa vemos que es necesario tener una mirada histórica general sobre el período de tiempo que abordaremos, el siglo XX, donde detectamos ciertas cuestiones como el imperialismo y las revoluciones, que serán centrales a lo largo de toda la cursada. Por eso, este primer apunte busca conocer el contexto previo al siglo XX y las grandes corrientes o temas que deberemos aprender para entender todo lo que viene después: la Gran Guerra, el período de entreguerras y la Segunda Guerra Mundial. Asimismo, en el contexto mundial también ubicaremos a la Argentina, que se insertará de un modo peculiar en todo el entramado político-económico desarrollado.

El pueblo despierta hacia finales del siglo XIX

1. Nos encontramos en un mundo cambiado por la Revolución Francesa de 1789, que cuestionó el poder de las grandes monarquías. La soberanía, que se consideraba dada por Dios al monarca, estaba fuera del alcance de los ciudadanos comunes. Sin embargo, con la revolución y sus ideas de libertad, se consiguió pasar la soberanía al pueblo. Es decir, ahora era el pueblo quien poseía el poder de elegir quién lo iba a gobernar. La cuestión de la soberanía era tratada con anterioridad, incluso por hombres de la Iglesia como el P. Suárez, quien decía que la soberanía era dada por Dios, pero al pueblo; a su vez, el pueblo daba la soberanía al rey, y por eso debía velar por satisfacer las necesidades de su pueblo y evitar, bajo toda circunstancia, explotarlo y maltratarlo. Como se ve en Historia de 3° año, la dinastía de los Borbones buscó con sus reformas entregar mayores libertades a su pueblo, pero también buscó evitar que las enseñanzas del jesuita Suarez llegasen a las Universidades, pues significaba un grave peligro para su poder real.

2. Junto a este debate por el poder, fueron surgiendo los nuevos Estados nacionales europeos, donde los burgueses dominaron toda la situación política. Hacia finales del siglo XIX ya se pensaba nuevas formas de legitimización política, como el voto ciudadano, aunque siempre con exclusiones que llevarían tiempo modificar (muchos excluían a determinada clase social, a las mujeres, a los colonos, etc.). Sin embargo, las clases desplazadas, como la clase popular, mucho más pobre y sin educación, también era consciente de la necesidad de poder votar y, así, lucharon mediante revueltas para obtener el derecho al sufragio. Los nuevos gobiernos liberales (ya sean monarquías constitucionales o repúblicas) buscaron ciertas reformas que, en la mayoría de los casos, determinaron que la población masculina adulta pueda ejercer su derecho al sufragio.

La economía mundial y la división internacional del trabajo

3. Mientras los gobiernos europeos iban evolucionando hacia lo que conocemos como democracia, sucedieron grandes cambios económicos que afectaron ese mismo proceso político. Al fin y al cabo, en la historia del hombre, la economía, la política y la cultura se hallan íntimamente conectadas.

4. En el siglo XVIII y XIX, contemplamos el surgimiento del capitalismo. En España, por ejemplo, en tiempos donde América era su gran colonia, se impulsaba el mercantilismo, que era la acumulación de riqueza (metálico) en las arcas reales. Eso se lograba mediante el monopolio entre la metrópoli (España) y las colonias (América española, entre otras). Las riquezas americanas iban a llenar las arcas reales españolas, y aquí se enviaban productos diversos, aunque generando un lento desarrollo social. En otras partes del mundo, como en Gran Bretaña, se había pasado a una economía capitalista y liberal. Se debía liberar el mercado para que se pueda comerciar con quien uno quiera, y así el capital (dinero) se mantenía en circulación. A diferencia del mercantilismo y monopolio español, Gran Bretaña prefería invertir en el comercio y así generar más riquezas, comprando materias primas (como, en el caso de Argentina, cueros y cebo) y vender productos manufacturados (vestimenta, armamento, posteriormente ferrocarriles). Así, las naciones que entraron en un proceso de libre-comercio, lograron un desarrollo mayor en sus capitales. El capitalismo lo definimos como "sistema socioeconómico caracterizado fundamentalmente por la propiedad privada de los principales medios de producción (recursos, capitales, infraestructura) y la libertad reconocida a los individuos para realizar contratos que regulen sus propios intereses... sistema basado en la organización del trabajo asalariado, diferenciándose de otros sistemas fundados en la utilización de mano de obra esclava o servil".

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⏰ Last updated: Mar 12, 2020 ⏰

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Historia Mundial del siglo XXWhere stories live. Discover now