Endless

•1• Obscuridad

Obscuridad.

Desde que tengo memoria todo lo que se encuentra a mi alrededor ha estado cubierto por la obscuridad, aquellos recuerdos lejanos de mi vida antes de esto son tan borrosos que ya no logro saber cuales están allí por algún tonto sueño y cuales son reales, hace más de 250 años que ocurrió pero aun escucho su suave voz llamándome entre toda esa obscuridad, el...
El fue la única luz que ha existido en mi horrible eternidad, su sonrisa era un rayo de sol que atravesaba todas las nubes de tormenta e iluminaba mi camino, desde que la luz se fue de sus ojos, se fue de mi vida y ya nada ha sido lo mismo, aunque todo el mundo ha cambiado desde ese entonces no he podido volver a ser el mismo que cuando él estaba y mucho menos he logrado superarlo y dejar el pasado... por que el recuerdo de tu mirada fría y tu cuerpo inerte sigue enterrado en mi pecho como una estaca que aunque no logro matarme mantiene ese dolor constante y desgarrador.

Aun salgo a volar por las noches tan alto como mis capacidades me lo permiten... pensar en que quizás una de esas estrellas alberga todos tus recuerdos y tu hermosa sonrisa me reconforta, decir que ese día morí internamente sería exagerado pero puedo asegurar que tu existencia quedó grabada en mi como una cicatriz de un cuchillo que abrió mi corazón, no te puedo decir que la oscuridad es del todo horrible solo que pierde el sentido que todo sea negro, extraño tus colores que teñían mi vida, tus dulces sonrisas que iluminaban mi mundo y tus cálidas manos que se aferraban a las mías hasta el último momento, no, definitivamente por mas que pase el tiempo no lograre superar tu etérea existencia, estaría dispuesto a salir al sol e incinerarme bajo este si de esa forma pudiera ver tu rostro lleno de vida solo una vez más.

Aunque los siglos pasen y todo el entorno cambie una parte de mí seguirá atorada en aquella hermosa época donde caminabas de mi mano al anochecer para alejarnos de todos y todo, solos tu y yo, la sensación de tus labios encajando de manera perfecta con los míos mientras te volvías un desastre con cada toque, todo aquello ahora son solo hermosos recuerdos y tengo tanto miedo del pasar del tiempo por que todos aquellos momentos preciosos para mi se ven cada día un poco más lejanos. A veces cierro los ojos y escucho tu voz pero por cada día qué pasa esta se distorsiona un poco más y se vuelve más alejada y débil, tengo miedo... demasiado miedo a que llegue el día en el que por más que lo intente no pueda recordar tu melodiosa voz, desde hace siglos que mis ojos se volvieron incapaces de derramar lágrimas pero podría apostar toda mi eternidad a que el día en que te perdí sentí esa húmeda calidez rodar por mis mejillas.

Te extraño tanto y si me vieras de esta forma estarías regañándome mientras que en tus hermosas facciones se dibujaban pucheros y ceños fruncidos mientras me reprenderías por volverme un pálido amargado melancólico que a penas y se dignaba a salir de casa para alimentarse, deseo con toda mi alma, si es que esta existe, que pudieras hacer eso, pero lo más seguro es que ahora ya no quede mas que polvo de ti en aquel solitario y frío ataúd que he visitado miles de veces con la esperanza de un día llegar y no encontrar esa horrible y helada lápida con tu nombre y dos fechas... la fecha en la que mi felicidad apareció en este mundo y la fecha en la que me fue arrebatada, desearía tanto un día llegar y descubrir que no ha pasado más de dos siglos desde que tu corazón latía y tu cálida sangre recorría tus venas, llegar y darme cuenta de que solo tuve una horrible pesadilla con los ojos abiertos, juro que si eso ocurriera correría a morder tu adorable y tentador cuello, preferiría mil veces convertirte en un ser horrible de obscuridad como yo y que me odiaras por toda la eternidad por hacerlo antes que dejar que tu cuerpo se enfriara y perdiera toda vida de nuevo... las primeras veces que pase por allí, incluso ahora lo sigo haciendo no puedo evitar pensar en si tendrás frío en donde quiera que ahora estés o si te sientes solo, me preguntaba una y mil veces si yo te haré falta tanto como tu me la haces a mi , jamás fui de pensar en la vida más allá de la muerte, me parecía absurdo, pero decidí aferrarme a la idea de que aunque ya no estabas conmigo tu luz seguía brillando en algún lado, quizás estabas en ese paraíso del que tanto hablabas mientras me decías que yo no era un monstruo y mucho menos un ser de obscuridad, cuando me decías que yo merecía más que cualquier mortal entrar en aquel lugar y cuando yo te decía que ese lugar no existía decías que si había una criatura tan bella como yo en la faz de la tierra era seguro que pertenecía al mismo paraíso, en aquel entonces solo me reía de todas esas palabras pero ahora deseo que sean ciertas, deseo que toda tu efímera belleza esté en algún lugar tan majestuoso como el que me describías y deseo con mas fuerzas que ese lugar tenga un lugar para una alimaña de la obscuridad como yo por que deseo mas que cualquier otra cosa en el mundo poder volver a mirar solo una vez tus ojos llenos de luz y vida.
Solo una vez más quisiera tenerte a mi lado, pero de nada sirven todos estos sueños y deseos por que ya no estas aquí. Sin importar cuanto lo desee y se lo suplique a la luna cada vez que esta se posa en el firmamento tú no volverás a mis brazos, quizás mi destino es extrañarte por toda mi eternidad, pero estoy dispuesto a aceptarlo, por que te ame con todo mi obscuro y marchito corazón y aun lo sigo haciendo aunque hayan pasado centenares de años.

Mi luz.

Mi sol.

Mi vida.

Mi Hoseok.