【𝕄𝕚𝕟】

648 95 19
                                    

-Capítulo 5-

—¿Tienes hambre? —preguntó —, ¿qué quieres comer?

—Pollo —sonrió—, solamente pollo.

El mayor sonrió enternecido y pidió la comida, llegó y se la dieron.

Mientras Chittaphon comía con gusto el detective lo observaba. Pensando y revisando algunos datos del pequeño chico que tenía al frente.

El tailandés termino de comer y agradeció sonriendo.

Lo llevaron a lavarse la cara y las manos, cuando regresó el oficial estaba peleando con alguien más.

Chittaphon se puso serio otra vez, no quería parecer vulnerable o algo por el estilo.

—Tengo una pregunta —habló Ten.

—Aquí yo hago las preguntas —comentó Min-seung.

—¿Por qué Taeyong fue a prisión en vez de a una correccional juvenil? —preguntó de todas formas.

—Verás —explicó Min—, Taeyong estuvo un tiempo en una correccional, mató a tres de sus compañeros ahí, sus asesinatos son fríos y los realiza sin ninguna pizca de compasión. La prisión es más segura y sus asesinatos son considerados como los de un mayor de edad. No te imaginas la cantidad de sangre que...

—Okay, ya entendí, ya entendí. No necesito detalles —interrumpió Ten.

—Como dije antes —continuó el Sr. Ji—, yo hago las preguntas.

Chittaphon se quedó callado y se limitó a contestar las preguntas.

No sabía porque, pero le estaba dando sueño.

—... saber si tú —Min-seung interrumpió lo que estaba diciendo al darse cuenta de que el interrogado no estaba para nada bien—... ¿Estás bien?

El menor rápidamente asintió, los parpados le pesaban, se sentía desesperado... como cuando estaba con Taeyong. Le entró una risa estúpida.

—Maldita sea —Min se acercó a Ten—, ¡hey! ¿Estás bien?

El tailandés regresó en sí y prestó atención. Pero se sentía abrumado y cansado.

El pequeño chico se puso de pie con dificultad y estiro los brazos hacia afuera, hizo ejercicios de respiración por dos minutos y se sintió mejor.

Se volvió a sentar mirando con curiosidad al detective, estaba seguro de haber sentido algo parecido a lo que sentía con Taeyong, pero ignoró el hecho.

Ji Min-seung se levantó y habló hacia el oscuro vidrio que había.

—Creo que es mejor terminar por hoy —dijo y salió de la habitación.

Min le indicó al menor que esperara afuera del establecimiento, que iría a decirle algo antes de que se vaya.

Espero a fuera, espero y espero. Hasta que el detective al fin apareció.

—Gracias por cooperar hoy —hizo una leve reverencia, Ten imitó la acción—. Solamente una cosa... ¿sabes lo que dijo Taeyong sobre ti?

Negó ligeramente con la cabeza.

—Dijo —su sonrisa se borró—, dijo que tú y él, tenían una relación muy fuerte.

—Eso es mentira —estaba irritado—, ya les dije la verdad. ¿Qué más quieren saber?

El superior estaba un poco nervioso ante lo que iba a decir.

Primero le devolvió las cosas que Chittaphon se había sacado: anillos, collares, celular, etc. Casi se olvida de todo eso.

Tuvo dificultad poniéndose los piercings.

—¿Me ayudas a ponerme este de aquí? —le preguntó al mayor.

Min-seung, mucho más nervioso al estar tan cerca del delicado rostro de Chittaphon, se lo puso donde le indicó.

Se alejó y continuó con lo que le iba a decir.

—Es verdad que —preguntó el detective, ya no parecía nervioso—, ¿qué tú y Taeyong tenían relaciones sexuales?



【Criminal】|| 𝒯𝒶𝑒𝓉𝑒𝓃Where stories live. Discover now