Mimado

Navidad

A pesar de que el frió estaba presente en toda la ciudad esa noche buena, en una habitación el calor inundaba como si fuera el trópico.

Los cuerpos tibios y sudorosos se movían en un constante vaivén, las palabras sobraban en ese momento, lo único que se necesitaba era que el tiempo se detuviera para congelar ese instante de profundo amor que se estaban demostrando. 

- Cra-Craig...- el nombrado soltó un gruñido

Gemidos y jadeos resonaban en la habitación, no temían ser escuchados pues eran las únicas almas en el inmueble. 

- Craig, estas aaaagh estas siendo rudo- un suave susurro salieron de unos labios rosados, hinchados al ser besados con pasión constantemente esa noche.

El pobre rubio pensaba que era probable no haber sido escuchado por el pelinegro, este se encontraba sumido en su placer, moviendo las caderas a un ritmo desenfrenado, haciendo el clásico sonido de las pieles chocando, los cabellos negro se apegaban a la frente sudorosa de Craig, que mantenía los ojos cerrados mientras se mordía el labio inferior, Tweek sentía que esa imagen de su novio era tan erótica que no le importo su incomodidad para seguir disfrutando de esa vista tan privilegiada.

- Honey...- el chico había pegado la frente con la de su amante rubio, mientras suplicaba por él

- Aquí bebe- contesto mientras rodeaba el cuello del otro con sus brazos

- Aaagh Honey...- al pelinegro le era imposible articular más palabras

El rubio al sentir las mejillas del otro arder, lo tomo de la nuca y atrajo al chico sobre él para besarle conteniendo en parte el gran gruñido que el pelinegro soltó al llegar al clímax, sintió su cuerpo temblar al saberse tan lleno, apenas si se dio cuenta que también había logrado alcanzar ese punto. Su cuerpo estaba siendo inundado por nuevas sensaciones, que su cerebro no alcanzaba a procesar todas al mismo tiempo.

Durante 5 minutos se quedaron ambos en la misma posición, hasta que el pelinegro libero de su prisión al cuerpo más pequeño que se encontraba bajo él, ambos aun jadeantes no lograban decir más, entrelazaron sus manos y se miraron por unos segundos antes de que en los labios de casa uno se formara una sonrisa.

- Te amo Craig- dijo el rubio con sinceridad

-Y yo a ti Tweek, feliz navidad- respondió el otro de la misma forma

- ¿ya son más de las 12?- pregunto extrañado

El pelinegro estiro la mano para tomar su celular, siendo encandilado al prender la pantalla y tener el brillo de esta tan alto.

- Son las 01:45, el tiempo vuela cuando te diviertes- bromeo

- Jeje... Cierto ¿Tus padres no llegarán?- el rubio se acurruco en el pecho de su novio

- Si yo creo que ya deben estar por llegar, espero eso si que Tricia llegue antes que ellos, una fiesta de adolescentes no debería ser hasta tan tarde- frunció el ceño

- Que lindo, te preocupas por tu hermana

- Te equivocas, me preocupo por mi o ¿a quien crees que retaran mis padres?

- Se que te preocupas por ella- besos sus labios- aunque trates de negarlo chico rudo

- Hablando de rudo- cambio el tema para no verse atrapado con su rol de hermano sobreprotector- ¿Te duele algo? Creo que me excedí con la fuerza

- Solo un poco, pero puedo aguantarlo

- No deberías, tendrías que haberlo dicho- acaricio la mejilla del otro