19.- Lluvia

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Miraculous, les aventures de Ladybug et Chat Noir y sus personajes son propiedad de Thomas Astruc y Zag Entertainment.

Palabras: 416.


19.- Lluvia

El día en que derrotaron al Hawk Moth original y a Mayura llovía tanto que parecía un presagio del dolor que desataría. Gabriel Agreste y Nathalie Sancoeur, desenmascarados y expuestos ante el mundo, derrotados por dos adolescentes.

Marinette no sabía de dónde había sacado las fuerzas Adrien para no destransformarse y revelar que él era Chat Noir frente a todos. Adrien era tan fuerte, lo admiraba por ello. Aunque el secreto había caído un par de horas después, cuando Chat golpeó la claraboya de su cuarto pidiendo que le dejara entrar, helado y empapado, tiritando. Se había desmayado y la magia se rompió, Plagg salió despedido de su prodigio.

—Se ha pasado horas vagando bajo a la lluvia como Adrien —había explicado Plagg con tono preocupado—, Marinette ¿se va a morir?

La muchacha había tocado su frente sintiéndola caliente.

—Tranquilo, Plagg, se pondrá bien, creo que se ha resfriado, tiene un poco de fiebre.

»Tendrás que ayudarme un poco ¿de acuerdo?

—Haré lo que quieras.

Marinette se había transformado en Ladybug y había saltado a la calle, con el chico en brazos, para entrar en la panadería y pedir a sus propios padres que le permitiesen pasar allí un par de días hasta que la cosa se calmase. Por supuesto, no se habían negado, también habían visto en la televisión que Gabriel era Hawk Moth. Había regresado a su cuarto y esperado a que Sabine le pidiese ayuda con Adrien.

Cuando Adrien hubo abierto de nuevo los ojos, en el cuarto de invitados de la casa de los Dupain-Cheng, se la había encontrado a su lado.

—Marinette... oh, no, Ladybug me matará, no volverá a confiar en mí —había murmurado con voz débil y rasposa.

—No lo hará, ¿a que no, Tikki?

Y allí habían acabado los secretos entre ellos y, con el tiempo, su relación se había afianzado y evolucionado hasta el punto en el que se encontraban ahora.

Los días en los que la climatología se asemejaba al del desastre, Adrien, se sentaba junto a la ventana, con una taza humeante entre las manos y la mirada perdida, sumido en sus pensamientos. En días así, Marinette, no podía evitar sentirse como una intrusa en su propia casa, sin ser capaz de ofrecerle un consuelo real. Daba igual cuántas bromas hiciera Plagg, cuántos "te quiero" le dedicase ella o cuántas sabias palabras pronunciasen Wayzz y Tikki, nada le hacía sonreír.

—Estoy aquí —susurró Marinette a su oído, abrazándole con fuerza.

—Lo sé, princesa, gracias.

Fin

Notas de la autora:
¡Hola! La lluvia es uno de mis temas preferidos, además da la casualidad de que hoy está lloviendo, así que el ambiente ha sido perfecto. Echaba de menos escribir algo un poco triste, mañana volvemos al fluff.

Adrinette en abrilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora