Curas Mi Dolor [EDITADA]

El amor de mi vida

A partir de este capítulo la secuencia que ha tenido la historia con respecto a un capítulo de Jennie y otro de Nayeon  sucesivamemte cambiará.
Esto es solo un pequeño aviso, continúe con su lectura. Besos 😘

  Kim Jennie

   La noche en la que descubrí que era adoptada la pasé en casa de Lisa, una pijamada de nosotras junto a Rosé explicándole lo que pasó y llorando. Esto es triste, demasiado. No me creía aún que fuera adoptada. Que la familia con la que crecí, con la que me crié fuera una farsa. Que ellos no fueran mis padres de sangre. Al otro día mi novio llegó a casa de la maknae y al momento caí en sus brazos. No me alejaba de él para nada. No quería. Solo sus brazos me consolaban. Un rato más tarde nos encontramos todos en casa de Twice. Estaban las integrantes, Vernon, mis mejores amigas, Jimin, mi hermana y yo. Todos esparcidos por la sala, algunos sentados en los sofás, otros en el suelo que estaba lleno de almohadas para acomodarnos y demás. El tema del cual se hablaba era sobre Nayeon y yo, las adoptadas.

—Chicas, entendemos como se sienten. No es lindo haber crecido en un lugar que resulta no ser su verdadera familia, pero no pueden negar que en su niñez fueron felices. Ambas siempre tuvieron todo lo material que quisieron y siempre tuvieron todo el amor de sus padres. No creo justo que ahora les paguen de esa forma —plantea Momo.

—No es fácil... —murmuro.

—Estoy de acuerdo con Momo —asegura Lisa—. Deberían pensar bien y recapacitar sobre esto que están haciendo —sugiere—. Piensen... ¿Cómo creen que están ahora los señores Im o los Kim? Están destruidos porque han perdido a sus hijas. A sus niñitas, a las que le dedicaron toda su vida. Chicas, esto no es justo ni para ustedes ni para ellos —argumenta.

  Todos nos quedamos en silencio. Estaba claro que ambas pensábamos en lo que habían dicho. Siento la mano de mi novio en mi hombro y levanto la cabeza para verle. Él estaba sentado en el asiento y yo en el suelo con unas almohadas, había sido mi decisión ya que estaba más cómoda recostandome a él.

—Tienen razón, amor —susurra y apoyo mi mejilla en su rodilla, sin dejar de observarle.

—Vámonos —suplico, en un apenas audible murmullo.

—Ok —accede.

—Chicos, yo... debo irme —anuncio intentando encontrar una excusa pero no la hallo.

—Está bien —asiente Nayeon, sonriendome—. Ten mucho cuidado, cualquier cosa me llamas —asiento y me levanto.

—Entonces ya nos vamos también —dice Rosé.

—Adiós —nos despedimos de los demás con la mano y salimos de la casa de Twice.

—¿Estarás bien? —cuestiona Lisa, abrazandome.

—Claro —responde Jimin por mi—. No se preocupen chicas, yo la cuidaré —asegura.

—Vale —ellas se van en el auto de la menor y yo con mi novio.

   Nos subimos al auto y él me observa.

—¿A dónde quieres ir, amor? —pregunta.

—A tu apartamento. Solo quiero estar a solas contigo —me acomodo en el asiento con tristeza.

—Entonces vayamos a mi departamento —accede.