Desorden

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Qué nos queda en el ávido placer,
De amarnos como sea
En ésta segunda vez
Para vencer la rudeza del amor,
Para creer,
Que no todo está en su puesto,
Que cualquier beso se tropieza,
Cualquier caricia se pierde
Y de repente nos habita el desorden.

Qué nos queda dentro, o afuera en el patio,
Qué nos une mientras alguien cocina
Y nadie lava su plato,
No siempre el mundo nos abandona,
Nosotros mismos nos olvidamos del mundo.
Y empezamos a vivir como indigentes,
Como por fin locos y sin miedo...

Qué nos queda por si acaso;
Sigue la pandemia en los ojos y en la boca,
Por si las naciones se siguen consumiendo,
O qué nos queda después del sufrimiento, de acabada la fiesta,
Cerrado el burdel,
Qué nos queda...

Qué tan frágil pueda ser la vida
Sin los zapatos bajo cama
O sin los condones en el piso,
El polvo aún en la alacena
Y en el corredor
Por donde transita el alba,
Qué nos permite ser tan informales en casa y después en la calle,
En una escuela o en una asonada,
Qué nos queda si de pronto ya no exista la excusa, o el excusado,
Por amor a Dios,
Qué nos queda después del Holocausto que interpretaba Martín salas en el tatlelolco.

Qué nos queda por enésima vez
En el corazón tejido
Después de haberlo roto.

¿Volverá el orden?

[CULMINADA]  Reliquias Encontradas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora