❝¿Por qué un demonio usaría un teléfono?❞
❥ fantasía au
❥ esto es algo, pero no sé muy bien qué
❥ no acepto adaptaciones de esta historia :( disculpen
AVISO, GENTE
este fic sucede en un mundo fantasioso completamente creado por mí...
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Minho miró la sopa con un ceño tan fruncido que a Jisung casi se le escapa una carcajada estruendosa. Así que tomó el tazón en sus manos y le dio un sorbo, mirando discretamente a la visita para que entendiera lo que debía hacer. Minho parpadeó, incrédulo.
— Ah— dijo. Y, con muchísima desconfianza, imitó a Jisung. Su cara fue un poema.
Cuando la señorita Han le ofreció algo de carne, él comenzó a negar de forma tan efusiva que incluso Jisung se asustó un poco. "Es como Hyunjin", se apresuró a explicarle a su madre; por alguna razón Minho se veía demasiado disperso. Jisung supuso que no quería mostrar a Jiseo sus colmillos.
Luego de un rato sorbiendo su sopa, Minho picó a Jisung en las costillas y señaló el pequeño plato de verduras salteadas que había a un lado de su brazo. Eso lo desconcertó un poco, pero no cuestionó nada. Le pasó el plato a Minho y recibió a cambio una sonrisa tenue.
— ¿Te gustan las verduras, Minho?— preguntó Jiseo al ver que el chico sí comía algo aparte de la sopa. Pero Minho sólo asintió sonriente antes de tirar todo el contenido del plato dentro del tazón de caldo—. Me... alegra.
Jisung se apresuró a terminar el almuerzo luego de eso, o de otra forma su madre habría descubierto que de hecho Minho era bastante raro. Jiseo les permitió irse sin mucho obstáculo, y Jisung aprovechó para proponerle al otro su idea de un paseo junto a sus amigos. Además de que tenía muchas preguntas que hacerle.
Como "¿en qué forma viajaste para llegar aquí?", cuando Jisung intentaba quitarse el pijama y Minho fingía que se tapaba los ojos.
— A través del comunicador central— contestó. Jisung decidió pasar por alto que lo atrapó viéndolo, después de todo no le daba tanta pena—. Lleva cualquier cosa a cualquier lugar existente.
O "¿cómo es el cielo en el infierno?", que mantuvo a Minho pensando bastante rato mientras Jisung buscaba una bufanda que prestarle y se echaba algo de perfume.
— No sé, es como de un azul oscuro, parecido a este— señaló la chaqueta que Jisung pensaba usar, arrugando la nariz—. Los colores son menos alegres allá, no sé explicarlo. El lugar es tan grande que los colores cambian dependiendo de dónde estés y... oye, no uses perfume.
Jisung lo vio rascándose la cara. Su nariz se puso roja.
— ¿Eres alérgico?— preguntó, y Minho acentuó su ceño fruncido.
— No estoy muy seguro de qué quieres decir con eso, pero me lastima. Mi nariz me pica...— Minho se puso serio, entrecerró los ojos y, con un espasmo pequeñito, estornudó. De inmediato llevó ambas manos a su nariz—. ¡¿Qué mierda fue eso?!
— Un estornudo— dijo Jisung, y los ojos de Minho se abrieron tanto que sus cejas rozaron algunos mechones de cabello—. Pasa todo el tiempo, tranquilo. ¿Jamás estornudaste?
