Mi felicidad y mi tristeza Pt.1 [sirius y tu]

Sueños Y Más Sueños

Sirius narrando

Estaba en el comedor hablando con Marlene, quería distraerme de alguna manera, de hecho por eso le dí a James la idea de molestar a Quejicus pero lamentablemente salió mal y James salió corriendo tras de Lily. Pude ver cuando llegó Elena y se sentó a comer, o más bien a jugar con su comida, estaba sola, y mientras observaba su fino rostro vi que unas lágrimas empapaban sus mejillas, se las secó y se paró apresuradamente, fijé mi vista en ella con el propósito de que ésta, al sentir mi mirada, me volteara a ver... Pero no fue así.

Después de un rato de estarlo dudando decidí ir tras de ella, me despedí de Marlene y acto seguido me levanté y salí del Gran Comedor.

Al salir busqué a Elena con la mirada pero no estaba, así que me asomé y efectivamente la vi, con un chico de Slytherin, él me ponía los pelos de punta, se ve de lejos que la quiere.

Estaba dispuesto a irme cuando vi que le agarró la mano y Elena se desmayó, Jasper se aseguró de que no hubiera nadie viendo así que me escondí tras el barandal mientras lo hacía y rápidamente me volví a asomar para no perderlo de vista, pasó una mano tras la espalda de Elena y debajo de sus rodillas y la cargó. Pero no empezó andar hacia el castillo si no hacia el bosque prohibido.

Salí lo más rápido que pude y logré alcanzarlo

—Serpiente, ¿a dónde crees que la llevas?— dije seriamente apuntandole con mi varita

—Pierdete traidor de la sangre, concéntrate en tus asuntos y déjame a mi hacer lo mío.

Siguió avanzando, pero el hecho de que estuviera frente a él ayudó a que no pudiera avanzar más

—Bájala ahora.— puso a Elena en el suelo y sacó su varita

—Vamos Black, con todo— después de esto su propósito fue atacarme con un Desmaius pero pude defenderme y contra-atacar con un Petrificus Totalus  el cual no pudo esquivar, cayó al piso y corrí hacia Elena

—Elena, Elena responde por favor.

Acaricié su rostro, la cargué y con paso apresurado me dirigí con madame Pomfrey y pidiéndo que avisaran a mis amigos.

En lo que cualquier persona llegaba me quedé ahí con Elena, sin despegarme. Fue entonces que llegó Lily junto con Alice, y detrás de éstas James y Remus. Madame Pomfrey nos explicó que no entendía muy bien lo que sucedía, no hasta que llegó Xenophilius y explicó que Elena estaba sufriendo de apariciones

—Ya veo— empezó madame Pomfrey—Su amiga Elena probablemente fue "atacada" por ésta aparición

—¿Cuándo despertará?

— Depende de que tan pronto la aparición cumpla su objetivo señorita Evans. Con su permiso, tengo que ver cómo lidiar con esto y avisarle a sus maestros. —Y sin más que decir se fue

Nos quedamos un rato hablando y por más que intenté convencerlos de quedarme, Remus no me lo permitió asegurando que debía descansar y tenía clases a las cuales ir, y me fui con ellos al cuarto y esperé lo suficiente para que se durmieran, agarré la capa de invisibilidad de James y cuidadosamente me fui con Elena, ni loco la dejaré sola, ya no más.

Llegué y pasé toda la noche con ella, dormí ahí tomado de su mano, James ya sabía que estaba ahí, pero decidió dejarme, sabía lo mucho que quería a Elena.

Ciertas veces, mientras observaba a Elena, en su cara aparecían gestos de disgusto, yo asumiendo que tenía pesadillas, acercaba mi silla a ella y acariciaba su rostro suavemente mientras le repetía que todo estaba bien, una vez, el tercer día en la noche, estaba moviéndose muy bruscamente y mis ya típicos hábitos de calmarla no funcionaron, así que tomé medidas más drásticas y me senté en la cama, pasé mi brazo bajo su cuello atrayéndola a mí y asegurando su cercanía abrazándola con el brazo libre y ella con su cara recargada en mi pecho, así me quedé dormido junto a ella, oliendo su fino  aroma y acariciando sus suaves brazos