Narra Samantha Después de la clase con Mamen. Hablé con Anaju para tranquilizarme y me dijo que si quería jugar a las cartas para despejarme. Acepté y nos pusimos a jugar. Eva vino y se tumbó en el sofá. Me pareció raro no verla con Flavio. A los 5 minutos llegó Flavio
F: Eva ven que te quiero enseñar una cosa
E: ¿Es algo que has compuesto?
F: Sí - dijo sonriendo
E: ¡Que guay!
Se fueron los dos y Anaju me miró y me abrazó
Aj: Todo esto pasará
Pasaban los días y la gala se iba acercando y cada vez Flavio y yo nos separabamos más.
Llegó el viernes y fuimos a comer. Estaba fatal por lo de Flavio. No sabía que hacer. Me puse a ver mis fotos de instagram ya que no tenía mucha hambre. No me acordaba que subí una foto con él. En ella él me daba un beso en la mejilla
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Al ver la foto me rompí a llorar. Bruno me vio se acercó a mi y me cogió la mano para después llevarme a un lado apartado y hablar conmigo. Detrás iba corriendo Eva
S: Soy tonta lo siento
B: No eres tonta es normal que estés así
S: Es que era un pilar muy tocho para mí...
E: Bruno nos puedes dejar un minuto solas porfa
B: Vale luego me cuentas
E: Sam, no estés mal. Flavio está mal por ti, pero no está enfadado. Esta decepcionado. No te quiere hacer daño, te está dejando un tiempo para que puedas pensar. Si quieres hablar con él, he quedado esta noche con él en el box de Laura. Iba a enseñarme lo que ha compuesto nuevo, y iba sobre ti. Sigue enamorado. Yo si fuera tú, iría.
S: Gracias Eva, te quiero
E: No es nada.
Pasaban las hora y no veía a Flavio por ningún lado. Estaba nerviosa por lo de esta noche. El pase de micros fue bastante bien. Para despejarme me puse a componer en la sala de Capde. De vez en cuando miraba a la sala del piano y él estaba allí, solo.
Llegó la hora de la cena. Me sorprendió que se sentó en la misma mesa que yo. No quería mirarlo pero a veces se me escapaba una miradita. En una de las veces lo vi mirandome y cuando le miré desvió la mirada.
Eran las 23h y nos abrieron la habitación. Me senté en la cama con Eva para hablar mientras llegaba la hora. A la una se levantó de su cama, cogió un manta y salió de la habitación. Eva me dio un toquecito en el hombro como si me estuviera diciendo "esta es la tuya"
Me levanté y fui detrás de él. Esperé en el sillón un poco para que le diera tiempo a sentarse en el piano y empezar a tocar. Empecé a escuchar una melodia y me acerqué. Desde fuera se escuchaba que estaba cantando la canción que me dedicó y cuando terminó se puso las manos en la cara y se puso a llorar.
Yo al escuchar la canción empecé a llorar. Entré en el box con las lágrimas en los ojos
Narra Flavio No podía dejar de pensar en ella ni tampoco dejar de tocar esta canción. Fue una gran sorpresa al ver que entraba por esa dichosa puerta que hace días cerré de un portazo
S: Se que no soy la más indicada para decírtelo pero... ¿Estás bien?
Hubo un silencio. No podía creérmelo.
F: Esa misma pregunta quería hacerte yo. Te vi llorando esta mañana. Pero... no tuve los cojones de acercarme y decir que me perdonarás. Así que le dije a Bruno que te ayudará. No me gusta verte así y lo sabes
Narra Samantha No podía creerme lo que Flavio me acababa de decir me senté en una silla cerca de él.
S: Me sigue encantado la canción que lo sepas
F: Le he hecho algunos cambios ¿Quiere escucharla? - me dijo tímidamente
Yo asentí. Empezó la canción y pude localizar los cambios que le había hecho. Contaba lo que nos había pasado y lo que él sentía. Las últimas frase la dijo con la voz entrecortada y comenzó a llorar.
F: Lo siento - dijo con la voz entrecortada
S: Fla... Porque nos hacemos esto... - dije empezando a llorar
F: No lo sé...
Me acerqué a él y le abracé. Seguidamente él me dio un beso. Nunca había sentido un beso así. Ese beso tenía verdad. Nos separamos y comenzó uno de los recitales más bonito que he presenciado. Era muchísimo mejor que el de todas las noches anteriores
